Si te sientes desanimado con tu lento progreso, ¿que deberías hacer?
Has estado poniendo el tiempo, trabajando incansablemente para deshacerte de la grasa y esculpir tus músculos. Pero las cosas se están moviendo a un ritmo glacial y estás perdiendo motivación, dudando de tus esfuerzos y luchando por mantenerse positivo. Cuando al final lo logras, sabes que toma un esfuerzo arrollador y una cantidad interminable de paciencia, pero también vale la pena sentir ese momento.
Para ayudar a los atletas aficionados a superar sus problemas, hemos recurrido a un estudio hecho por especialistas deportivos del Centro Médico Wexner de la Universidad Estatal de Ohio que abre una nueva ventana compartiendo algunos consejos prácticos pero inteligentemente diseñados para combatir el lento progreso en el gimnasio, tanto mental como físicamente.
1 – Elimina los pensamientos negativos
Esta es la psicología básica; cuando la negatividad comienza a contaminar tu motivación, desafía estos pensamientos con pensamientos positivos. Es fácil dudar de cada esfuerzo antes de que se presente un obstáculo, y sentirte como un fracaso si el progreso simplemente no está allí todavía. «Por ejemplo, crees que nunca te pondrás en forma o que nunca podrás correr un maratón»…bueno, es el momento de detenerte y pensar lo que has logrado en tu vida incluyendo los objetivos logrados anteriormente. Piensa en que lo harás de nuevo.
Reafirmar que puedes, de hecho, correr un maratón puede cambiar completamente tu motivación y si no lo haces de inmediato, cuanto más practiques esta afirmación, más fluido serás al hablar en este lenguaje positivo.
2 – No dejes que las dudas se conviertan en realidad
Esa parte repugnante e insidiosa de tu cerebro a la que le gusta desnudar sus garras y sanguijuelas pueden matarte; lo que necesitas hacer es reconocer su presencia y luego superarla. No todos los pensamientos pesimistas deben llegar a buen término.
Piénsalo; «si cada uno de tus pensamientos se hiciera realidad, probablemente estarías muerto o en la cárcel». Los impulsos negativos, como voy a ser un fracaso o no va a suceder esta pérdida de peso son brutalmente desastrosos para un progreso real; pero si no puedes vencerlos, definitivamente deberías buscar la manera de hacerlo.
3 – Coge algo de coraje
Forzar la confianza es lo que las personas hacen cuando dudan de sus capacidades; creen que tienen que estar 100% seguros de que van a lograr algo. Si bien esto parece un truco mental lógico, el enfoque de «imitarlo hasta que lo hagas» no siempre es el método más saludable. No tienes que pensar que lo derrumbaras, solo ten el coraje de intentarlo; el coraje es algo que puedes aprovechar cuando no te sientes seguro.
Así que, aunque creas que tu entreno programado o el WOD de referencia te desharán, tener el valor y la fuerza para darlo todo, a pesar del resultado, puede mantenerte hambriento de progreso y menos propenso a sentirte desganado.
4 – Desarrolla puntos de control
Celebra los pequeños logros; conectarte con tu proceso es vital, ya que hace que el viaje hacia tu destino final sea mucho más regulable. Si intentas hacerse más fuerte, acéptate cada vez que ganes más volumen con las las pesas libres, y cada vez que obtengas una mejor marca personal; además, debes enfocarte en el momento que miras adelante.
Cada vez que venzas esos mini-objetivos, serás recompensado con un impulso de confianza; pero, deberías agregar una cantidad constante de combustible a tu motivación. Simplemente sé deliberado, realista y específico sobre cuales son estos objetivos y como se ven.
5 – Deja de comparar las cosas
La naturaleza humana, ya sea por necesidad evolutiva o no, nos empuja a clasificarnos unos a otros; si te sientes desanimado sobre cuanto tiempo te lleva ver la definición muscular en tus brazos, para que tu resistencia se fortalezca, o para acelerar tu progreso, podrías estar errado. Recuerda que estás corriendo tu propia carrera, tanto figurativa como literalmente.
Siempre habrá alguien más rápido y en forma, pero cuanto antes te des cuenta y estés en paz con eso, mejor, No necesariamente crecerás igual o progresarás tan rápido como los demás, pues si estás trabajando en forma e individualidad propia de ti, solo debes seguir el camino planeado para llegar a tus objetivos, sin mirar el objetivo de los demás; date cuenta de esto: no tienes que ser el mejor, pero puedes ser el mejor…. solo maximiza cualquier potencial sin explotar.
6 – Crea tu propio mantra personal
Encuentra tu propia palabra o frase de poder cuando estás experimentando dolor o fatiga; si eres rudo y sabes lidiar con el dolor, podrás superar la fatiga física incluso la pasada y esta asociación te ayudará a seguir adelante. El umbral psicológico también juega un importante papel en la conexión mente-músculos y el progreso, que al final de cuentas es la que te ayuda a desarrollar mejor tu capacidad psicomotora ante los hierros.
7- Realiza un seguimiento visual de tu progreso
Existen aplicaciones para ayudarte a controlar cada caloría que quemas y comes, pero para mantener la mente ocupada deberías pasar todos los días y cruzarte con un calendario propio que debe estar tu camino, sea en tu dormitorio o en la cocina. Verificar tus registros, tus fotos, tus errores y tu motivación son cosas esenciales para verte mejor o peor ante el espejo y ante ti mismo o los demás; ahora, si todas las señales visuales pueden mejorar psicológicamente tu motivación no querrás romperla. Si lo trazas todo visualmente, tus objetivos se convierten en una conquista.
8 – Solo da un paso
Sería increíble si estuvieras motivado y positivo todos los días, pero no es realista. Cualquier desafío es exactamente eso, un desafío, y algunos días te sentirás adolorido, golpeado o completamente desmotivado por hacer mucho, pero no tienes que sentirte bien para hacer el bien.
Si no estás de humor para levantar un poco de metal pesado o golpear el pavimento, dar un paso en la dirección correcta tendrá un impacto mucho más fuerte en cumplir con tus objetivos que no dar un paso en absoluto. Solo ten en cuenta que el sobre-entreno abre el camino al fracaso, siempre.
9 – Varía siempre en tus entrenos
Si estás experimentando un progreso moderado, el 99% del tiempo se debe a una meseta; para atravesar una depresión en el gimnasio, necesitas una sacudida. Tus músculos tienen una sorprendente capacidad para adaptarse rápidamente a un factor estresante, por lo que si realizas el mismo entreno (estresante) cada semana durante más de 4 a 6 semanas, tendrás que inducirlos una nueva adaptación; habla con tu entrenador y mezcla tu rutina con variedad para lograr superarte a ti mismo.
Recuerda además, que puedes buscar un compañero, modificar tu dieta, o desarrollar tus instintos cambiando de gimnasio; todo tiene que ver con ese gramo de motivación.
Fuente
- Mens Journal: I am Feeling Discouraged About My Slow Progress in the Gym. What Should I Do?