Cuando la vida se pone dura, debes trabajar duro
Los levantadores exitosos encuentran consuelo en la disciplina; esto es lo que puedes aprender de ellos, en estos momentos donde el clima es tu rival. Hace frío y nada te motiva a empezar tu dieta y un plan de entreno equilibrado y consistente, pero los ganadores, entre ellos varios de nuestros amigos aficionados son implacables.
Ellos saben lo que quieren, hacen un plan para conseguirlo, y siempre lo siguen; nunca parecen perder su pasión por el entreno porque es parte de sus vidas y están siempre dentro de un rango de buenos hábitos. En fin, obtienen del No Pain No Gain, verdaderos resultados, dejando muy alejados de ellos las excusas, incluidas el clima o los miedos a las enfermedades de temporada.
Pero, ¿qué separa a los incansables de los perdedores que se burlan y se rinden ?; es simple, porque cogen la disciplina y la usan diariamente, siendo familiar para ellos o para ti si eres un ganador, el reto físico y mental, desde seguir una dieta hasta enfrentar a los hierros fríos al anochecer.
Si estás pasando por un momento difícil debes aprender algunas cosas que te recomendaremos desde MASmusculo, porque cuando la vida se pone dura, debes trabajar duro. En lugar de aferrarte a las frustraciones que son comunes o esperar que pase el mal clima, deberías canalizar tu energía (incluidas las comidas que ingieres en exceso) en algo productivo, lo cual te brindará recompensas.
Más Voluntad significa Más Fuerza, Mejor Cuerpo y Mucha Felicidad !!!
1- Despeja la niebla
Los momentos estresantes, el drama social, las pérdidas trágicas, los divorcios, o simplemente un pasar por errores en el entreno, pueden ser parte de las cosas que golpean a la mayoría de la gente, pero cuando llegas a ser implacable, no hay nada que te pueda detener en tu dieta o planificación del entreno.
El sudor y el dolor están por dentro; los ganadores son de esas personas que pierden el aliento y siguen centrados. Cuando todo termina, ya han limpiado suficiente niebla mental para ver el lado más optimista de lo que están enfrentando.
2- No te auto-victimices
Cuando la vida se pone dura, debes trabajar duro, significa que debes ser más resistente, pues quejarte, revolcarte a la autocompasión y culpar a otros en sus rostros, hace que llegues a ser adicto a la victimización. Esa actitud de debilidad adoptada puede propagarse como un cáncer; provoca un desamparo interior que se propaga en el tiempo y se hace habitual, destruyendo todos tus planes.
Lo que deberías hacer en ese momento es luchar contra tu interior, patear tu propio trasero, antes de que alguien más tenga la oportunidad de robarte tu poder, puesto que cuando la vida se pone dura, debes trabajar duro. ¿Puedes pensar en un mejor remedio cuando las circunstancias de la vida te hacen sentir impotente?
Lo mejor es usar el polvo que te niebla la mente para encontrar alguna cosa que te hace duplicar en tus esfuerzos; ese diálogo interior te dirá si eres capaz de reunir la disciplina durante los tiempos difíciles y, solo de esta forma estarás seguro de aprovechar tu poder cuando la vida se te hace más fácil.
3- Sumérgete en tu entreno
Aplica tu ética de trabajo a tu entreno; no le des a nadie la oportunidad de pensar que eres un perezoso, distraído, ineficiente o débil. Debes sumergirte en tu entreno como tu propio estilo de vida, tomando al mismo como parte de tu propia actividad laboral diaria, lo cual será divertido y te dará hermosas recompensas.
Si odias tu trabajo, es obvio que no debes odiar a tu entreno, porque el esfuerzo debe valer la pena; si quieres empezar a retomar todo, ve a una clase de pilates, zumba o hula-hoop y siente lo mejor de la vida; en fin, todo debe verse como agradable a tus sentidos.
Ahora bien, si te pones metas por encima de tus ideales, como poseer un cuerpo diez para el verano o ingresar a una competición de fitness, los entrenos divertidos consistirán en bombas espectaculares, obtener un tiempo bajo tensión brutal, lograr que tus espinillas se vean sangrientas o te aparezcan callos desgarrados, lo cual te hace un duro, pero sucederá entonces algo gracioso, “la vida se te hará más fácil”.