Fitoesteroles de soja, contra el colesterol
Los esteroles vegetales y los estanoles vegetales, comúnmente conocidos como fitoesteroles, son compuestos derivados de plantas que están estructuralmente están relacionadas con el colesterol. Las dietas humanas en la antigüedad eran probablemente ricas en fitoesteroles, proporcionando hasta 1g/día, sin embargo, la dieta occidental típica hoy en día es relativamente baja en fitoesteroles.
Aunque los fitoesteroles están presentes en la dieta en cantidades similares al colesterol, son mal absorbidos y las concentraciones sanguíneas tienden a ser bajas. Después de la absorción en los enterocitos, los fitoesteroles se excretan activamente de nuevo en el lumen intestinal por algunos transportadores dentro del organismo; los fitoesteroles interfieren con la absorción intestinal del colesterol al desplazar el colesterol de las micelas, además de facilitar la excreción de colesterol biliar en las heces.
Numerosos ensayos clínicos han demostrado que el consumo diario de fitoesteroles a partir de alimentos enriquecidos o suplementos con fitoesteroles de soja pueden reducir significativamente el colesterol sérico de baja densidad (LDL – dañino) en un 8-10%, mejorando el funcionamiento del sistema cardiovascular, sobre todo en períodos de entreno intenso donde se requieren de bombas espectaculares y absorción de nutrientes hacia los músculos, mediante arterias limpias.
Por otro lado, resultados de algunos ensayos clínicos sugirieron que la suplementación con fitoesteroles de soja en dosis relativamente bajas puede mejorar los síntomas del tracto urinario relacionados con la hiperplasia prostática benigna, pero se necesitan más investigaciones para confirmar estos hallazgos. Los alimentos y bebidas con fitoesteroles de soja añadidos ya están disponibles en muchos países de todo el mundo, y algunos países permiten las declaraciones de propiedades saludables de dichos productos comerciales.
Los fitoesteroles de soja y el corazón
Un importante estudio sobre la protección coronaria publicado en The American Journal of Clinical Nutrition cita que probaron la hipótesis de que una sola dosis diaria de fitoesteroles de soja agregados a carne molida reduce las concentraciones plasmáticas de colestero TC y LDL en personas jóvenes pre-hipercolesterolémicas.
En el estudio de cuatro semanas, con tres ciegos, 34 estudiantes universitarios varones con TC plasmática elevada (5,85 ± 0,70 mmol/L), colesterol LDL (4,02 ± 0,60 mmol/L) y colesterol TC-HDL (5,5 ± 1,2 ) se asignaron aleatoriamente al grupo de control (carne de res molida) o de tratamiento (carne de res molida con 2,7 g de fitoesteroles).
Los resultados de este estudio indican que el consumo de la carne molida suplementada con fitoesteroles de soja redujo las concentraciones plasmáticas de colesterol TC, LDL y TC: HDL desde el inicio en un 9,3%, 14,6% y 9,1%, respectivamente (P <0,001). El tamaño de partícula LDL no cambió, lo que sugiere que la disminución fue principalmente de número de partículas; las disminuciones fueron similares en personas con antecedentes familiares y sin antecedentes de enfermedades cardiovasculares prematuras.
SI bien existen varios estudios contradictorios sobre el apoyo al corazón, incluso que una alta dosis de fitoesteroles puede inducir a enfermedades cardiovasculares, lo que deseamos significar es que los fitoesteroles de soja incluidos en la dieta (sin excesos) es fundamental para mantener las arterias limpias y preparadas para recibir una carga nutricional adecuada, conforme se sigue una dieta deportiva.
