Cobre
La principal función del cobre es actuar en la movilización de hierro para la síntesis de la hemoglobina
El cobre es un micromineral o elemento trazo, necesario en pequeñas cantidades para desempeñar sus funciones en el organismo; esencial para el organismo, considerado el tercer oligoelemento más abundante después de hierro y zinc. Se encuentra fácilmente en alrededor de 75 a 150 mg distribuidos sobre todo por el hígado, cerebro, corazón y riñones; el restante por los huesos, músculos y sistema nervioso. Una pequeña cantidad de cobre también puede ser encontrada en el plasma, en combinación con algunas proteínas. Muchos enzimas son dependientes del cobre para su puesta en marcha y, por esta razón, el cobre es muy importante para el crecimiento y desarrollo normales de los menores.
Importancia del Cobre
- La principal función del cobre es actuar en la movilización de hierro para la síntesis de la hemoglobina (proteína responsable por el transporte de oxígeno en la sangre), siendo fundamental en el proceso de la respiración.
- Participa también de la síntesis de melanina (pigmiento presente en piel y cabellos), colágeno (proteína responsable por la integridad funcional de los huesos, cartílagos, piel y tendones) y elastina (proteína responsable por las propiedades elásticas de los vasos sanguíneos, pulmones y piel).
- El cobre participa en la producción de [noradrenalina], un neurotransmisor fundamental para la puesta en marcha del sistema nervioso.
- También es importante para la puesta en marcha adecuado de los mecanismos de defensa del organismo (sistema imunológico), metabolismo de glucosa y colesterol, contractilidad del miocardio (tejido muscular cardiaco) y maduración de leucocitos y hematíes.
- Actúa como co-factor enzimático (responsable por activar determinadas enzimas, haciendo con que ejerzan su función) de varias metaloenzimas, entre ellas, 2 enzimas antioxidantes: La ceruloplasmina y el superóxido dismutasico de cobre-zinc, lo que puede explicar, en parte, su posible papel como antioxidante, auxiliando en la protección del organismo contra la destrucción provocada por los radicales libres.
Las principales fuentes naturales de cobre son las carnes, hígado animal, riñón animal, azúcar negro, alcachofa, almendras, cacahuete, castaña-del-pará, nueces, uva-pasa, arroz, avena, cacao en polvo, chocolates, harina de soja, frijol-de-soja, ajo, lenteja, guisante, frijol, garbanzo, legumbres, frutas, hortalizas, cebada, pan de centeno, setas y huevo de gallina. Además de estas fuentes, se puede encontrar cubre en algunos peces, moluscos, mariscos, ostras, cangrejos y lagostas. Como suplemento, el cobre está disponible en cápsulas, comprimidos, soluciones de uso oral e inyectable. Dependiendo de la forma farmacéutica, el cobre puede ser encontrado como gluconato de cobre, sulfato de cobre, óxido cúprico o aminoácidos quelados con cobre. O también puede ser encontrado en asociación con otras vitaminas y minerales, en diversos suplementos nutricionales.