Glutamina, ¿usas aminoacidos para tu digestión?
Glutamina, el poderoso aminoácido reconocido en la nutrición deportiva también puede servirte para protegerte en Navidad, ¿cómo?.
La L-glutamina es un aminoácido que se descompone a partir de proteínas. En realidad, la glutamina es el aminoácido más abundante en el cuerpo y constituye el 60% de nuestros músculos.
Sin duda, tomar este amino adicional a tus batidos tradicionales puede ayudar a aumentar la masa muscular, permitirle quemar más grasa y ayudar a curar los músculos doloridos después del ejercicio. Pero debido a que los órganos de tu cuerpo están revestidos de músculos, la L-glutamina es más que eso.
Protegiendo el revestimiento intestinal
Tu estómago e intestinos tienen un revestimiento interior duradero que tiene una capa gruesa de moco para protegerte del ácido en tu estómago y las bacterias en tu cuerpo.
En un tracto gastrointestinal sano, este revestimiento interno es una capa apretada de células y tejido sin grietas obvias de fisuras.
Sin embargo, si sufres el síndrome del intestino permeable, desarrollas grietas o fisuras en este revestimiento interno.
Estos espacios permiten que las bacterias y las partículas extrañas ingresen a tu cuerpo. Cuando esto sucede, puedes experimentar inflamación en todo el sistema. Además de esta inflamación, puede experimentar dolor abdominal, pérdida de apetito, fatiga, fiebre y calambres abdominales.
Tu revestimiento intestinal en realidad usa glutamina como combustible para crear una superficie fuerte para la digestión y absorción.
Lo que hace el aminoácido es comprimir las uniones abiertas que ocurren y las activa para crear más moco necesario para una digestión adecuada.
Entonces, la suplementación con L-glutamina es el tratamiento más eficaz para potenciar el revestimiento intestinal de quienes padecen intestino permeable, malabsorción o las enfermedades inflamatorias, incluidas las agudas generadas por los atracones navideños.
La importancia de la glutamina
Las proteínas son un nutriente esencial y lo que ayuda a nuestras células, músculos, tejidos conectivos e incluso a nuestro intestino a realizar funciones básicas diarias.
La glutamina, en particular, ayuda a acumular colágeno (ya sabes, ese famoso péptido que le da a la piel esa juventud, firmeza, apariencia flexible), así como para las células de nuestro intestino.
Además como citamos anteriormente, este aminoácido ayuda a asegurar que la integridad del revestimiento del intestino se mantenga en su mejor forma.
Esencialmente, tu intestino funciona mejor cuando puede utilizar la glutamina para obtener energía, y dado que funcionas mejor, sentirás los beneficios residuales que vienen con una barrera intestinal más fuerte, como mantener la digestión equilibrada, incluso durante las fiestas navideñas de fin de año.
La L-glutamina también es importante para el sistema inmunológico; el revestimiento intestinal alberga moléculas inmunitarias clave llamadas inmunoglobulina, por tanto alimentarlo con glutamina permite un tener defensas más fuertes para protegernos de toxinas e infecciones, propias de temporada.
Recuerda que la glutamina se encuentra en fuentes alimenticias enteras como la carne de res, pollo, pescado, lácteos, huevos, frijoles, remolachas, repollos, apios, cole de Bruselas o verduras de hoja verde.
Si entrenas duro y sigues una dieta irregular en Navidad, definitivamente deberías usar un buen polvo de glutamina (que los hay de varios tipos), que cómo lo muestra el siguiente vídeo es un compuesto fundamental para tu salud y rendimiento deportivo.
