Si haces cardio para estar saludable, ¿prefieres desayunar o no?
Hacer cardio en ayunas tiene sus ventajas o desventajas, dependiendo de cada situación, pero de ninguna manera es determinante a la hora del rendimiento o de los resultados esperados, sobre todo a nivel principiante o recreativo.
Según los estudios, las sesiones de cardio moderado-intenso, realizadas en la mañana en ayunas, estimulan la pérdida de grasa. Bueno, hacer ejercicio con el estómago vacío no solo quema relativamente mucha grasa, sino que también entrena a tu cuerpo para quemar aún más grasa en el futuro cercano, pero muchos, incluyendo preparadores de experiencia citan que es quizás desagradable hacerlo e incluso negligente, porque cuando todo es cuestión de equilibrio, ni las hormonas, ni las calorías, ni las otras cosas se comportan de manera individual, sino como un todo.
Ahora, según los científicos deportivos estadounidenses de la Universidad Estatal de California en San Marcos todo es relativo. Lo que pasa que el estado nutricional tiene numerosos efectos sobre el metabolismo del ejercicio y las respuestas psicológicas; el efecto del cuerpo en «estado alimentado» sobre los cambios en la valencia afectiva eran desconocidos.
En este caso, el presente estudio publicado en el International Journal of Exercise Science examinó cómo alimentar al cuerpo antes de hacer cardio influyó en la intensidad del ejercicio autoseleccionado, las respuestas afectivas durante el ejercicio y una sensación de confort al hacer cardio moderado a intenso en algunas circunstancias.
Comparando los esfuerzos, científicamente
Los investigadores lograron que 25 sujetos, que estaban físicamente activos durante al menos 2 horas a la semana, corrieran en una cinta durante media hora en 2 ocasiones diferentes por la mañana, además se les enseñó cómo calificar su esfuerzo en la escala Borg y les pidieron que hicieran ejercicio con una intensidad = 13. Una vez recibieron un desayuno ligero con 138 kilocalorías en forma de carbohidratos media hora antes de comenzar a correr y la otra vez desarrollaron sus rutinas cardio en ayunas.
En este estudio, los resultados mostraron que el desayuno no causó que los sujetos de prueba hicieran ejercicio con mayor intensidad o cubrieran más kilómetros durante la sesión; en otro contexto, sintieron el placer o el confort (valencia afectiva) de la misma manera, además el desayuno tampoco tuvo influencia en la medida en que los sujetos de prueba se sintieron excitados en la sesión de ejercicios por la mañana.
Estos resultados sugieren que para las personas que realizan ejercicio de acuerdo con las pautas actuales para mantener la salud (no hablamos de culturistas, atletas de alto rendimiento o similares) podrían hacer cardio en ayunas o no, al levantarse y esto no afectará las variables que influyen en sus programas de entrenamiento, ni en la motivación o el placer de entrenar, aunque estos resultados no deben generalizarse dentro de lo que se llama ayuno prolongado, dentro de un entrenamiento HIIT o de alta intensidad o tampoco tiene que veer con el ayuno intermitente.
Fuente
- International Journal of Exercise Science Research: Effect of Fed State on Self-selected Intensity and Affective Responses to Exercise Following Public Health Recommendations
