Las resoluciones importantes
El enfoque adecuado podría establecer un vínculo especial con el programa de entreno
Al establecer las metas cada año se necesitan de experiencias pasadas y algunas cosas nuevas para realizar los ajustes necesarios y ver las cosas desde un punto de vista diferente; escuchar o sentir la esencia de cada uno, hace que las debilidades sean vistas en el momento justo, permitiendo al ser interior rugir más fuerte que nunca para encarar un programa de entreno con la mayor fuerza de voluntad posible, que aunque sea un recurso limitado, se gestiona por autorregulación según los psicólogos.
Es decir, las decisiones que se tome a lo largo del día sean buenas o malas, se relacionan al auto-control; por ejemplo después de una jornada de trabajo o estudios, es natural que se encuentre el sofá mucho más fascinante que un conjunto de pesas, y esto se debe a que puede ser muy difícil mantener la concentración, pero afortunadamente hay estrategias como las siguientes que pueden ayudar a resolver estas cuestiones y redirigir el enfoque en las cosas que importan realmente.
El programa de entreno adecuado
Para no sentir el estrés al ingresar al gimnasio para entrenar duro, se debe inicialmente evitar los conflictos de tiempo y las interrupciones potenciales; por ejemplo, si el plan actual hace que se tenga que ir corriendo al gimnasio después del trabajo comprometiendo el factor psicológico debido a los tiempos, este intervalo claramenet no es el ideal, y en su lugar es mejor intentar hacerlo temprano por las mañanas.
Las personas que realizan ejercicios en la mañana tienden a estar más comprometidos con su programa de entrenamiento y sus objetivos, y también están preparadas para afrontar el resto del día con entusiasmo; lo que apuntamos en este apartado es decir que las cosas deben hacerse lo más organizadas posible para que las excusas no aparezcan al momento de entrenar.
El entreno de acuerdo a las metas
La mayoría estará de acuerdo que cualquier ejercicio es mejor que ningún ejercicio, sin embargo, se requiere de un programa de entrenamiento y nutrición que impulse al practicante hacia sus metas; por ejemplo, si la meta incluye las ganancias de fuerza masiva, el protocolo estándar primero debe incluir un gran estímulo para los músculos en cuestión, mediante un programa de musculación con carga adecuada.
Aunque hay muchos beneficios cardiovasculares y de recuperación cardio de estado estacionario, se debe poner un énfasis menor en el cardio excesivo, porque podría quemar calorías en vez de ayudar al crecimiento muscular.
Trabajando con un instructor
Para las personas que creen firmemente en “sí mismos», contar con la ayuda de un profesional puede parecer una salida fácil, porque esto podría ser una de las mejores inversiones que puede hacer por sí mismo, si los fondos lo permiten; en primer lugar, ayudan a establecer una meta realista, que es crucial para mantener la motivación.
El instructor ayudará a refinar el objetivo a algo mucho más sostenible; después, proporcionan una estructura y un programa de ejercicio adaptado al nivel de condición física y el calendario personal, tomando en cuenta además, que cuando se paga por el tiempo del experto, esto se convierte en una obligación y no en una opción, ganando un aliado que acompaña constantemente durante el camino hasta llegar al final.
La recompensa al esfuerzo
En todos los casos se debe buscar un balance positivo cuando se entrena buscando un cuerpo diez, esto se comprueba durante el verano en la playa o disfrutando de un progreso visible al observar el espejo; todos los cambios deben motivar, sean grandes o pequeños, porque no hacerlo, podría robar la motivación adecuada para seguir, entonces, es importante tomar en cuenta este refuerzo positivo manteniendo la mirada en el premio.
Las pequeñas victorias son recompensables y apropiadas; estamos hablando de añadir 5 kg más a la barra, o comer una ración extra de proteína para sentir el cuerpo increíble, o empezar a bombear los músculos de otra manera, o inclusive probar ejercicios diferentes que estimulan el camino al éxito.
Si todo falla, es mejor revaluar los objetivos
Al final, todo se reduce a los parámetros de la meta sabiendo que es realista o no; un objetivo ambicioso debe ser claro y sobre todo respetar la regla del progreso constante paso por paso, pero los cambios deben estar dentro de los márgenes controlables por el practicante, ya sea en la dieta o en el entreno, haciendo que todo lo que se vaya comiendo se adapte a los objetivos, sin desperdiciar las posibilidades que nos dio la naturaleza, sobre todo antes y después de una dura sesión de entrenamiento.
Pocas personas pueden estar 100% comprometidas el 100% de las veces, pero cuando surgen los contratiempos, solo deben tomarse como un revés, y esto no debe derribar completamente los objetivos personales, en ningún plano de la vida.