La ribosa en la formación de compuestos energéticos
Puede ser importante en la recuperación de ATP tras contracciones intensas.
El interés en la suplementación de ribosa como uno ergogénico es debido a que no solamente aumenta los componentes energéticos, sino también puede mejorar la performance durante la realización de un determinado ejercicio. Sin embargo, lo que la ribosa puede proveer en cuestiones reales de beneficios en el rendimiento para el deportista está siendo evaluada tanto en animales como en humanos. En un estudio se investigó el papel de la ribosa en animales y su relación en la recuperación de los niveles de adenina nucleótidas en fibras musculares aisladas. Fue observado que cuando es añadida una solución de ribosa al músculo, había un aumento de 3,4 a 4,3 veces de las tasas de resíntesis, variando conforme el tipo de fibra utilizada.
Otro estudio evaluó como la producción de ATP por un músculo aislado en ratones podría ser mantenida durante una hora en el estado de restablecimiento (tras contracciones intensas) a través de la vía de recuperación. La recuperación de adenina a ATP fue comparada con y sin la adicción de ribosa al músculo, y se observó que la recuperación de ATP fue incompleta y habían sido observadas bajas tasas de recuperación de adenina tanto en el músculo en reposo (que no sufrió contracciones) como en el músculo post-contracciones. Sin embargo, la suplementación de ribosa aumentó en aproximadamente 5 veces la recuperación de adenina en el estado de reposo y post-contracciones. Esto indica que aumentando la recuperación de nucleótidos con la administración de ribosa, puede ser un importante indicador en la recuperación de ATP tras contracciones intensas.
En humanos realizaron un estudio vinculando a culturistas intermedios por un periodo de cuatro semanas con suplementación de ribosa, a fin de determinar sus efectos en la composición corporal y en la performance durante el ejercicio. No se encontraron diferencias estadísticamente significantes en la composición corporal entre el grupo placebo y el grupo ribosa, pero este último grupo presentó ganancias significantes en la fuerza y resistencia muscular, demostrando un aumento significante en la fuerza de una repetición máxima (1-RM) (p = 0,008). Sin embargo, vale la pena tomar en cuenta el hecho de que el grupo suplementado con ribosa aparentó estar menos entrenado que el grupo placebo.
En otro estudio, se utilizó como dosis diaria de ribosa 600 mg/kg de peso (aproximadamente 42 gramos para uno individuo de 70 kg) y fue realizado un programa de entrenamiento de 7 días con 2 sesiones diarias de entrenamientos de carreras. La concentración de ATP muscular se redujo aproximadamente en un 25% inmediatamente tras la ultima sesión de entrenamiento y permaneció baja durante 24 horas, en los grupos ribosa y placebo. Sin embargo, tras 72 horas, los que tuvieron suplementación de ribosa aumentaron el ATP muscular sobre el observado en el grupo placebo. Sin embargo, eso no fue acompañado por una mejor performance evaluada por el protocolo de carrera intermitente.