La cetosis
Los primeros días de una dieta cetogénica son difíciles, posteriormente el organismo permite a la persona tener sus niveles más altos de energía y concentración.
El cuerpo usa los carbohidratos como fuente primaria de energía. Cuando cortamos los carbohidratos del menú, en tres días el organismo entra en cetosis. Eso quiere decir que pasa a usar grasas como fuente primaria de energía. Se necesita entonces consumir grasas para que el cuerpo pase a quemarla. Si no se la consume, no se debe pensar que el organismo va inmediatamente quemar las grasas que se tiene en el cuerpo. El organismo va a pensar algo como “que pasa ?, no está viniendo grasas, mejor preservar las reservas que tengo aquí”.
Una vez que la grasa utilizó la fuente principal de energía del cuerpo, poco a poco ella va siendo consumida tanto de los alimentos y del cuerpo. Y lo mejor: como no hay más carbohidratos, no hay más picos de insulina que generan las temidas grasas localizadas. Si no hay más picos de insulina, no hay más inhibición de la liberación de la hormona del crecimiento, que ayuda a crear músculos en el cuerpo.
Los primeros días son los más difíciles en donde el cuerpo cambia del modo-carbohidrato al modo-grasas, pudiendo hasta generar un dolor de cabeza o malestar. Pero después todo se convierte en buena disposición del organismo; los niveles de concentración y energía se encontrarán en los niveles más altos e inclusive los problemas como la depresión pueden ser mejorados.