El rol de las hormonas anabólicas
Cuando la ciencia es controversial, la mente debe cerrarse a los mitos
La testosterona es una de las hormonas más importantes, pero no todos los amigos de MASmusculo conocen su real dimensión dentro del contexto de un determinado programa de entrenamiento, ya que la hormona es aguda y crónica, y sirve para muchas funciones en el organismo; es una hormona esteroide que cruza la bicapa lipídica del sarcolema (capa exterior de la célula muscular) y una vez dentro, aumenta la transcripción de proteínas (incremento de acumulación de proteínas).
Esta hormona de gran alcance también disminuye la degradación de proteínas, aumenta la producción de IGF-1, y mejora la reutilización de aminoácidos para promover una mejor síntesis proteica; un estudio hecho en 1986 (Griggs) demostró que hay un fuerte vínculo entre la testosterona y la capacidad de activar el ADN necesario para el crecimiento de células satélite.
La hormona del crecimiento HGH, otra hormona anabólica, así como el IGF-1 tienen en cambio una relación inversa en el sistema músculo-esquelético a lo largo del eje IGF-1; aquí, una cantidad en exceso durante el crecimiento de una persona, conduce a cambios rápidos en la estatura, mientras que su deficiencia, conduce a cambios más lentos.
La HGH desempeña un papel fundamental en la composición corporal para los adultos que entrenan porque puede aumentar toda la síntesis proteica del cuerpo, sin embargo, no produce un efecto significativo en la síntesis de proteínas muscular específica; por otro lado, los estudios encontraron un aumento en la síntesis de colágeno, así como un aumento en los osteoblastos, lo que sugiere un potencial para aumentar la remodelación ósea.
La controversia se instaló porque otros estudios también sustentados citan que el incremento de hormonas anabólicas dentro del entrenamiento de resistencia no aumenta la síntesis proteica y por consecuencia la hipertrofia; esto significaría que después de realizar muchos ejercicios, tener un nivel mayor de Testosterona u HGH no ayuda a mejorar el rendimiento en los siguientes ejercicios o incrementar la síntesis proteica.
Como los resultados son chocantes, controversiales, o relativos, todo lo que se usó como estrategia experimental tumbó la idea original que teníamos, tratando de crear un estado normal elevado durante el entreno o durante la recuperación muscular post-entreno.
Conclusiones
Estos estudios cuestionan los principios comunes del entrenamiento que indica que si realizamos un ejercicio multiarticular pesado que recluta una gran cantidad de musculatura durante la sesión, provocará un aumento en la liberación de hormonas anabólicas; una manera de decirlo también es comparar, porque si se disminuye la cantidad de tiempo entre las series o se manipulan las cargas, se impulsará una mayor producción de HGH, testosterona o IGF-1 circulante, pero sorprendentemente esto no aumenta directamente la síntesis proteica o la hipertrofia.
La hipertrofia no parece ser desarrollada por el aumento de la testosterona, la hormona de crecimiento HGH, y el IGF-1, como resultado de los ejercicios seleccionados, pero si parece depender de las vías intracelulares que involucran las proteínas STAT3, eEF2 y p70S6K, que aumentan la traducción de proteínas, su síntesis, y tienen la capacidad de causar un cambio en el fenotipo del músculo.
Estos estudios sacan a la luz una nueva forma de imaginar la hipertrofia y la síntesis de proteínas; antes de estos estudios, la mayoría de la gente citaba que la causa de la hipertrofia se debía al aumento de las hormonas anabólicas Testosterona, HGH y de IGF-1, y aunque muchos estamos en la misma situación, ahora nos topamos con esta investigación que zambulle en mitos todos los artículos que en relación con el tema…. que además está claro
La hipertrofia muscular es multifacética, pero cada vez se desarrollan a partir de la tendencia de la hormona anabólica.