Varias compañías de la industria durante el siglo 21 han empezado a estudiar el poder de las algas pardas para determinar como diseñar suplementos eficientes y totalmente naturales; una de ellas en Australia, dedicada a la biotecnología y la investigación descubrió como producir extractos de fucoidan, un complejo polisacárido sulfatado derivado de dichas algas. Este ingrediente que estaremos observando en un futuro en nuestros suplementos son seguros y con bioactividad de amplio alcance, especialmente para el cuidado de la piel y algunas aplicaciones de protección de la salud en general.
En particular los científicos australianos se fijaron en desarrollar ingredientes independientes y combinados como matrices por sus propiedades antivirales, antiinflamatorias y anti-envejecimiento, además de intervenciones sobre la salud intestinal y el sistema inmunológico. En este caso aprovecharon este extracto de algas pardas que es rico en fucosa, aunque puede presentar diferentes estructuras químicas y acción particular dependiendo de que especie de microalgas se deriva y el método de extracción.
Los proponentes y desarrolladores de suplementos de fucoidan trabajan con cultivos ecológicos certificados y algas en estado salvaje; entre ellas las especies Undaria pinnatifida y Fucus vesiculosus; la primera es llamada wakame popularmente, es de alta pureza, está constituida a base de acetilado y es rica en galactosa. Mientras en el hemisferio norte, el Fucus vesiculosus es llamado comumente fucus, que no está acetilado pero es alto en fucosa.
Los beneficios de las algas pardas
- Los compuestos fucoidanos son conocidos por su capacidad para mejorar la función inmune en modelos animales; se ha demostrado que ayuda a la respuesta inmune mediante el aumento de la madurez de las células dendríticas así como el aumento de las respuestas inmunolóicas innatas y específicas; también reduce las cargas de pro-virales en las infecciones más graves.
- Al ser biológicamente ingeridas por el organismo, van directo al interior del intestino, retrayendo de manera simultánea los problemas de inflamación simple o infección bacteriana, lo cual puede evitar las irritaciones del estómago o la aparición de úlceras.
- El poder de las algas pardas se demuestra por varios estudios hechos con estas variedades que indican que su poder antioxidante, para inhibir una variedad de radicales libres puede ser incomparable, además tiene un efecto protector sobre los daños UV en la piel; esto lo ahce por su alto contenido en polifenoles, especialmente por su poder contra cinco especies reactivas como el peroxilo, el hidroxilo, el peroxinitrito, el superóxido y el oxígeno singlete.
- Ejerce su potencial de anti-envejecimiento mediante el aumento de la proteína SIRT1 en hasta 32%, una sirtuina conocida como proteína anti-envejecimiento, que se asocia con los genes que coordinan y optimizan las funciones de las células, a medida que luchan para sobrevivir en un entorno estresante. Por ejemplo, el aumento del SIRT1 puede imitar los beneficios de la restricción calórica, una mejoría del metabolismo del azúcar o de los lípidos y el mantenimiento de una fisiología más jóven.
- El fucus inhibe por su parte la entrada de virus en las células; esto incluye la actividad contra el herpes, los virus, el VIH, y otros; no existen tratamientos para algunas condiciones o cargas virales, por ello es novedoso su uso en el área médica, puesto que incluso ha llegado a ser eficiente para tratar la hepatitis C crónica en experimentos hechos con animales y humanos.
- Los extractos de macroalgas se han asociado con el tratamiento del cáncer en Asia, sobre todo en Japón, Corea y Taiwán; el uso del fucoidan como suplemento se basa en algunas investigaciones limitadas, pero la experiencia de miles de años y tradiciones, así como los últimos estudios citan que puede ser útil para situaciones extremas, incluso durante la quimioterapia, puesto que ayuda al cuerpo a tener menos fatiga y tolerar mejor los tratamientos.
Fuente
- Nutra Ingredients US Research: Improve digestive health with fibregum