El magnesio puede incrementar el rendimiento en periodos de privación de sueño
Una opción natural para cuando dormimos menos pero entrenamos duro
En un estudio financiado por el gobierno japonés se demostró que una dosis modesta de un suplemento de magnesio puede reducir los efectos negativos de la falta de sueño sobre la capacidad de desempeño; esta investigación se vincula a un ensayo con seres humanos publicada en 1998 en el periódico nipón «Circulation» y que puede servir en ciertas ocasiones al momento de encarar algunos días difíciles.
Durante las pruebas se reclutaron a 16 estudiantes del sexo masculino con una edad media de 21 años induciéndoles a dormir 60% menos de lo que necesitaban; la mitad de los alumnos ingirió una bebida deportiva cero calorias con 25 mg de magnesio y 50 mg de calcio cuatro veces por día todos los días.
Los individuos ingirieron un total de 100 mg de magnesio extra por día; recordamos que en los países desarrollados el común de las personas consumen menos magnesio de lo recomendado pero se consume más calcio de lo requerido por lo que se asume que los resultados se vinculan a la suplementación con magnesio y no al calcio.
- En ese periodo los estudiante pedalearon contra una resistencia cada vez mayor antes como después del periodo de privación de sueño.
- Posteriormente los investigadores registraron la intensidad con que los músculos de los alumnos cambiaron a la respiración anaeróbica en donde el cuerpo convierte la glucosa en energía más rápido pero es liberado más ácido láctico de lo que el cuerpo puede eliminar.
- Este punto es conocido como el umbral anaeróbico siendo posible mantener esta intensidad de ejercicio durante un periodo muy limitado de tiempo.
Las conclusiones muestran que la privación del sueño redujo un poco la intensidad (medida como consumo de oxígeno) con que los alumnos alcanzaron el umbral anaeróbico y que esta reducción estuvo ausente en los alumnos que ingirieron magnesio extra; pero lo interesante está en que los que consumieron magnesio alcanzaron ese umbral más aceleradamente durante el periodo de privación de sueño.
Una posible explicación sería que la suplementación de magnesio aumentó la concentración de noradrenalina de los voluntarios; en este sentido los investigadores sospechan que los efectos habrían sido aún más pronunciados si los voluntarios hubieran recibido dosificaciones en diferentes niveles de acuerdo al tipo de físico o intensidad de entrenamiento.