EL CLA también fortalece el sistema inmunológico
Un estudio publicado en el Europe Journal of Clinical Nutrition investigó el efecto de la suplementación dietética de CLA (3g / día, mezcla 50:50 de los dos principales isómeros) sobre el sistema inmunológico y los lípidos plasmáticos, así como la glucosa en voluntarios humanos (hombres y mujeres) sanos.
El ácido linoleico conjugado (CLA) es una forma ligeramente alterada de ácido linoleico (LA), un ácido graso omega-6 importante para la salud humana; los ácidos grasos omega-6 se derivan de los alimentos que comemos principalmente de carne y productos lácteos, por lo tanto el CLA se encuentra principalmente en productos de carne y diarios. El interés científico en el CLA se estimuló por primera vez en 1988 cuando un investigador de la Universidad de Wisconsin descubrió sus propiedades contra el cáncer en un estudio de ratas alimentadas con hamburguesas fritas.
El CLA no puede ser producido por el cuerpo humano, pero puede obtenerse a través de alimentos como leche entera, mantequilla, carne de res y cordero; obviamente la suplementación es lo recomendable cuando se desea tener resultados específicos, puesto que el CLA es un potente antioxidante, anti-carcinógeno y anti-catabolito, así como potente potenciador del sistema inmunológico. Sin embargo, los elogios comunes sobre el CLA se refieren a la quema de grasa, la construcción y la retención de músculo magro, lo cual es interesante para los que entrenan duro buscando un físico espectacular.
Pero para términos de bienestar y salud mientras se entrena duro, el CLA puede ofrecer más que eso y específicamente su aporte inmunitario. Este estudio doble ciego, aleatorizado, de referencia controlada fue el escenario perfecto para trabajar con 28 participantes sanos de ambos sexos, de 25-50 años, recibieron, el grupo 1: aceite de girasol oleico (referencia), el grupo 2: 50% de CLA, el grupo 3: 50% de CLA + isómeros (50:50 CLA-forma triglicéridos).
Los tratamientos se administraron como suplementos en cápsulas de gel blando, proporcionando un total de 3 g (6 cápsulas de 500 mg) por día en los grupos de tratamiento durante 12 semanas, para después seguir un período de limpieza (si suplementación) de 12 semanas posterior a la intervención.
Los resultados indicaron lo siguiente, los niveles de IgA e IgM plasmáticas aumentaron (P <0,05 y 0,01 respectivamente), mientras que los niveles de IgE plasmática disminuyeron (P <0,05). Los suplementos de CLA también disminuyeron los niveles de citocinas proinflamatorias, TNF-alfa e IL-1beta (P <0.05), pero aumentaron los niveles de la citocina anti-inflamatoria, IL-10 (P <0.05).
Otro aspecto de la función inmune es la respuesta de hipersensibilidad de tipo retardado (DTH), que se redujo durante y después de la suplementación de CLA (P <0,05). Sin embargo, la glucosa plasmática, los lípidos, los resultados fenotípicos de los linfocitos no fueron afectados significativamente por la suplementación con CLA en cualquiera de los grupos que usaron el suplemento.
Las conclusiones indican que el CLA, un ácido graso que se encuentra naturalmente en productos lácteos y de carne así como en formato de suplementación, puede afectar de manera beneficiosa la función inmune en personas sanas, fortaleciendo los marcadores inmunológicos de modo a proteger de las posibles enfermedades, virus o condiciones inflamatorias, que pudieren derivar de los duros entrenos, que en definitiva castiga el cuerpo y el sistema nervioso central en cada sesión y en el post-entreno.
Este estudio fue apoyado por Loders-Croklaan, Países Bajos y el SEERAD (Ejecutivo Escocés Rural Ambiental y Departamento de Agricultura), lo cual da una certificación importante para demostrar como el CLA apoya al sistema inmunológico.
Fuente
- European Journal of Nutrition: Effect of CLA supplementation on immune function in young healthy volunteers.
