Tratamientos alternativos para la fibromialgia
El objetivo del tratamiento de la fibromialgia es controlar el dolor y mejorar la calidad de vida; esto se logra a menudo a través de un enfoque doble de autocuidado y medicamentos, pero las alternativas naturales están empezando a surgir, incluso en el círculo médico.
Los medicamentos comunes para la fibromialgia incluyen:
- Analgésicos: se puede recomendar analgésicos de venta libre, como ibuprofeno (Advil) o acetaminofén (Tylenol) mientras las versiones de prescripción, como el tramadol (Ultram), pueden usarse en casos extremos; si se utilizan con moderación para reducir el riesgo de efectos secundarios y dependencia.
- Antidepresivos: los antidepresivos, como la duloxetina (Cymbalta) y el milnacipran (Savella), a veces se usan para ayudar a tratar la ansiedad o la depresión asociada con la fibromialgia; estos medicamentos también pueden ayudar a mejorar la calidad del sueño.
- Medicamentos anticonvulsivos: la gabapentina (Neurontin) fue diseñada para tratar la epilepsia, pero puede ayudar a reducir los síntomas en las personas con fibromialgia. La FDA también aprobó la pregabalina (Lyrica) para el tratamiento de la fibromialgia.
¿Existen tratamientos naturales y alternativos para la fibromialgia?
Además de los medicamentos, un plan de autocuidado puede ayudar a sobrellevar los síntomas de la fibromialgia; los cambios en el estilo de vida y los remedios alternativos pueden reducir el dolor y hacer que la persona se sienta mejor en general. Muchos de estos tratamientos alternativos se centran en reducir el estrés y reducir el dolor y se puede utilizar en forma independiente o junto con los tratamientos médicos convencionales. Es importante tener en cuenta que la mayoría de los tratamientos alternativos para la fibromialgia no se han estudiado a fondo; la investigación hasta la fecha no apoya su efectividad, sin embargo los primeros estudios de hace una década muestran informes de éxito, aunque la literatura científica debe juntarlos en un macroestudio para dejar de ser anecdóticos.
Estos tratamientos incluyen la terapia física, la acupuntura, la meditación, el yoga, el ejercicio regular o dormir lo suficiente en la noche, terapia de Masajes, además de una dieta sana y equilibrada
La terapia puede reducir potencialmente el estrés que desencadena los síntomas y la depresión que a menudo está asociada con este trastorno. La terapia de grupo es a menudo la opción más asequible y brinda la oportunidad de conocer a otras personas que están atravesando los mismos problemas; la terapia individual también está disponible, pero bueno las alternativas son varias.
En relación a la nutrición, no se ha identificado una dieta específica para las personas con fibromialgia, no obstante algunas personas informan que se sienten mejor al seguir un plan de dieta o evitar ciertos alimentos. Siempre se debe tratar de comer una dieta saludable y equilibrada en general, lo que incluye un suministro constante de buena energía, evitando los alimentos inflamatorios que pueden empeorar los síntomas.
Estrategias dietéticas a tener en cuenta:
- Comer frutas y verduras.
- Beber abundante agua.
- Añadir más vegetales que carne a un plato.
- Reducir la ingesta de azúcar.
En fin, ir a un nutricionista también puede ayudar, ya que las nuevas tendencias indican algunas cosas importantes como la individualización de la dieta, de acuerdo a la analítica, pero también en función a los problemas físicos e incluso psicológicos. La idea es hacer pruebas de error hasta encontrar qué alimentos agrava o no los síntomas.
Fuente:
- Healthline Research: Everything You Need to Know About Fibromyalgia
