Regula la leptina para obtener resultados, Parte 1
De seguro, has oído probablemente alguien mencionarlo por lo menos una vez, pero no estás realmente seguro de lo que es ¿ verdad ?. La leptina ni siquiera fue descubierta hasta 1994, pero la investigación sobre esta hormona misteriosa ha estado aumentando y los científicos ciertamente no saben todo acerca de ella todavía, pero vamos a discutir lo que sabemos.
En primer lugar, es importante entender que la grasa no es simplemente un tanque de almacenamiento para el exceso de calorías o «energía potencial». Es en realidad un órgano endocrino, como una glándula tiroides o suprarrenal, por ejemplo; esto significa que la grasa (en este caso el tejido adiposo blanco) secreta hormonas, y la leptina es una de ellas.
La leptina es una hormona polipeptídica producida por adipocitos (células grasas); cuanto más grasa contienen los adipocitos, más leptina se libera. Piensa en la leptina como un controlador del metabolismo y un regulador del apetito, pero en realidad deberías enfocarte en los cambios en las reservas de grasa corporal controlando el sistema nervioso central de la homeostasis energética.
Parece complejo pero te presentamos un ejemplo sencillo;
- Comes por encima de las calorías de mantenimiento durante un período de días o semanas.
- Como comes más, las células de grasa se llenan de triglicéridos, lo que aumenta la liberación de la hormona leptina en el torrente sanguíneo.
El hipotálamo en tu cerebro tiene un intrincado sistema de comunicación con las células de grasa que incluyen receptores de leptina; cuando los niveles de leptina aumentan, la leptina se une a los receptores de leptina en el hipotálamo, enviando el mensaje de que está «alimentado». El hipotálamo luego envía señales al cerebro y al resto del cuerpo, disminuyendo el apetito y aumentando tu tasa metabólica.
La otra opción es que;
- Comes por debajo de calorías de mantenimiento durante un período de días o semanas.
- Tus células de grasa se contraen al comer, no comer, etc., y las células de grasa liberan menos leptina.
Tu cerebro siente que los niveles de leptina son bajos, y que ya no se «aprovisiona de combustible». El hipotálamo detecta la disminución de los niveles de leptina, disminuyendo la tasa metabólica y disminuyendo el gasto energético; también envía una señal «hambrienta», aumentando el apetito y animándote a comer.
La acción de la leptina no se limita sólo al hipotálamo; hay receptores de leptina en todo el cuerpo; esto permite que la leptina coordine con precisión el apetito, el metabolismo y el gasto energético.
En sí, tu cuerpo está programado para sobrevivir; por un lado, cuando la comida está disponible, la leptina te impide agregar demasiada masa de grasa. Por otra parte, la leptina te responde y te defiende contra la pérdida excesiva de grasa corporal, que podría amenazar tu supervivencia o la capacidad reproductiva.
En fin, deberías pensar en comer lo suficiente y el metabolismo se acelerará para mantenerse al día; si no lo haces, el metabolismo se ralentizará para mantenerte vivo; todo esto pone de manifiesto la importancia que debes dar a los alimentos saludables, que además son densos e nutrientes que te ayudarán a mantener tu metabolismo trabajando bien.
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Fuente
- T-Nation Reviews: Control Leptin and Control Your Leanness
