Los antibióticos naturales en otoño
El uso excesivo de antibióticos se ha convertido en una epidemia moderna; estas drogas han agotado nuestra inmunidad natural al matar las bacterias buenas en nuestras entrañas y también crear “superbichos” que se han vuelto resistentes a casi cualquier forma de medicamento prescrito. En lugar de hacerse más débil y agotar la capacidad natural del cuerpo para autocurarse mismo de una serie de dolencias, es ideal utilizar alimentos naturales y hierbas que son antibióticos naturales por excelencia, desde hace siglos.
Los mejores antibióticos naturales
- El astragalus: un adaptógeno, lo que significa que es un tónico general para el cuerpo, el cual ha sido utilizado durante miles de años en las prácticas medicinales chinas para estimular el sistema inmunológico y contrarrestar el estrés físico, mental y emocional. La investigación ha demostrado que puede ser muy eficaz para tratar resfriados, proteger el hígado y mantener a raya los virus.
- La cebolla: por defecto es antibacteriana y antiséptica; si una persona chupa una cebolla cruda, se cree que los componentes curativos de la comida podrían succionar la enfermedad directamente de ellas. Incluso se puede colocar algunas cebollas cortadas en la cocina para proteger el ambiente contra las bacterias no deseadas y mantener toda la casa saludable.
- La col: es una de las verduras crucíferas con propiedades antimicrobianas que pueden matar todo tipo de enfermedades de forma natural. Las propiedades antibióticas de la col se incrementan una vez que ha sido fermentada, así es mejor que se la aproveche en el chucrut, por ejemplo.
- La miel: aunque siempre se usó para combatir las infecciones, los científicos recientemente identificaron un ingrediente secreto en la miel que la convierte en uno de los antibióticos naturales más poderosos porque mata las bacterias no deseadas. Es una proteína llamada defensina-1 que las abejas agregan a la miel cuando la fabrican; hace que el sistema inmunológico tenga una defensa completa contra las enfermedades.
- Las verduras fermentadas: resembrar los intestinos con buenos microbios, que se pueden encontrar en casi todos los vegetales fermentados, puede mantener el sistema inmunológico fuerte. La salud intestinal representa alrededor del 80% de la inmunidad general a las enfermedades, por lo que añadir bacterias benéficas es esencial para la salud.
- La canela: a veces llamada antibiótico natural «letal», la canela se ha usado medicinalmente durante siglos. Incluso puede detener la E. coli, una bacteria obstinada que causa muchas enfermedades. Los expertos de la Kansas City State University descubrieron que la canela no solo actúa como un antibiótico natural, sino que está tan llena de antioxidantes que ayuda a estimular el sistema inmunológico de muchas maneras.
- La salvia: esta hierba es una maravillosa solución natural para problemas del sistema respiratorio superior. También puede ayudar con dolencias estomacales, reducir la fiebre de forma natural y ayudar con el resfriado común y la gripe.
- El tomillo: tanto su hoja como su aceite son antibióticos naturales muy efectivos; un compuesto en el aceite de tomillo llamado timol también tiene propiedades antimicrobianas, antifúngicas y antiprotozoarias.
Hay otros antibióticos naturales por ahí también que incluyen hierbas como el romero, el cilantro, el eneldo, la albahaca, el bálsamo de limón, el indigo salvaje, la echinacea, la hoja del olivo, la cúrcuma o la pimienta de cayena, el extracto de semillas de pomelo, el jengibre, el aceite de orégano y por supuesto, el bien ponderado ajo.
Con una oferta tan grande de la Madre Naturaleza para tratar dolencias de forma natural, con todas sus vitaminas, minerales y fitonutrientes para arrancar, ¿ por qué elegiríamos productos farmacéuticos ?
Fuente
- Natural Society Research: Natural Immunity: 8+ Natural Antibiotics We Should be Researching