Lesiones del Tendón de Aquiles
Tipos de alteraciones y tratamientos
Las alteraciones que pueden ocurrir en el tendón de aquiles en atletas, comprenden paratendinitis, tendinosis, bursitis retrocalcaneana y ruptura del tendón. MásMúsculo os resume en este artículo cada una de ellas.
Paratendinitis
Es la inflamación del paratendón que puede ocurrir con o sin la vinculación del tendón. El paratendón puede inflamarse por errores en el entrenamiento, uso de calzados inadecuados, acortamiento muscular del tríceps, o ejercicios de calentamiento o estiramiento inadecuados.
El atleta presentará dolor en la región posterior del calcañar que empeora con la actividad física, estando frecuentemente relacionado al aumento abrupto de la carga de entrenamiento. El examen físico demuestra aumento de la sensibilidad a la palpación de la región del tendón calcáneo, edema localizado, calor local, y claudicación.
Tendinosis
La tendinosis parece ser un proceso degenerativo relacionado a la edad, y que puede ocurrir solo o asociado con la paratendinitis. Una evaluación histológica reveló la hipercelularidad, proliferación vascular y una estructura de fibras anormal, diferente de un proceso inflamatorio. Durante el examen, se encuentra dolor a la palpación sobre la inserción del tendón o cerca de 4 cm arriba, frecuentemente asociado con un edema. La persona se queja de dolor en la deambulación y empeora cuando se queda mucho tiempo en pie.
Bursitis Retrocalcaneana
Es caracterizada por la inflamación de la bursa retrocalcaneana, que se encuentra en el calcáneo y en el tendón de Aquiles, estando algunas veces asociado o la tendinopatía o la paratendinitis; y frecuentemente hay un tumor posterior y superior prominente, denominada deformidad de Haglund.
Durante el examen, la persona presentará edema y dolor medial y lateral al Tendón de Aquiles.
Ruptura del Tendón de Aquiles
La ruptura del Tendón de Aquiles típicamente ocurre tras una dorsiflexión forzada y la persona tiene la sensación de que llevó una pedrada o un golpe en la pantorrilla, debido al fuerte dolor que siente en el sitio. A pesar del dolor súbito, muchas veces el atleta llega a la atención médica prácticamente sin dolor, caminando con cierta dificultad e imposibilitado de fijarse en las puntas de los pies.
Durante el examen, se encuentra un edema en el local, dolor a la palpación y frecuentemente es palpable un defecto en el sitio de la ruptura. Un examen clásico para diagnóstico es el test de Thompson, que consiste en posicionar a la persona en decúbito ventral y a seguir el médico realiza la compresión de la pantorrilla con la mano. Si no hubiere la flexión del pie o una gran disminución de esta, estará confirmado el diagnóstico de ruptura del Tendón de Aquiles.
Tratamiento
Paratendinitis, Tendinosis y Bursitis Retrocalcaneana: Estas patologías son adecuadamente tratadas con reposo, aplicación de hielo, administración de anti-inflamatorios y tratamiento fisioterapéutico. El tratamiento quirúrgico se da por excepción. Pero la mayoría de los profesionales recomiendan el tratamiento quirúrgico, debido la menor tasa de re-ruptura y el rápido retorno la actividad.
Están siendo publicados diversos trabajos sobre el tratamiento del Tendón de Aquiles roto, algunos defendiendo el tratamiento conservador, otros el tratamiento quirúrgico.