La dieta intermitente es mejor para perder peso
Nutricionistas australianos en la Universidad de Tasmania han publicado resultados de un estudio sobre la dieta intermitente baja en calorías en el International Journal of Obesity; según los científicos es más fácil perder peso si se hace las cosas por pasos, primero una dieta de dos semanas baja en calorías, luego una dieta de calorías equilibradas con la quema por otras dos semanas y luego volver a bajar las calorías, y, así sucesivamente; en este caso, la reducción intermitente de calorías produce más pérdida de grasa sin que se vea afectada la masa muscular.
El estudio se denominó «MATADOR» (minimizando la termogénesis adaptativa y desactivando el rebote de la obesidad) el cual examinó si la restricción energética por dieta intermitente mejoraba la eficiencia de pérdida de peso en comparación con la dieta de restricción energética continua y, de ser así, si la dieta intermitente atenuaría las respuestas compensatorias asociadas con la dieta energética continua.
Para desarrollar el estudio, los investigadores dividieron a 50 hombres con sobrepeso en dos grupos; ambos grupos recibieron una dieta baja en calorías, que proporcionó aproximadamente dos tercios de la energía que los hombres quemaban.
- La mitad de los hombres se colocaron en el grupo de control (CON), haciendo una dieta durante 16 semanas consecutivas.
- La otra mitad se puso en el grupo experimental (grupo intermitente, INT), que desarrollaron la dieta intermitente citada por etapas, o intermitentemente, lo que significa que siguieron una dieta baja en calorías durante dos semanas, y luego comieron exactamente la cantidad de calorías que quemaron, repitiendo este ciclo ocho veces.
Los investigadores les proveyeron su comida a los hombres, de modo que las cantidades se midieron hasta el último gramo, en un estudio controlado sobre dieta intermitente que, independiente la región del mundo donde ser realizó, tiene un sustento científico interesante. Los resultados mostraron que los hombres en el grupo INT perdieron un 50% más de peso que los hombres en el grupo CON, además, los kg extra que perdió el grupo INT fueron exclusivamente en grasa corporal.
Una vez que el experimento se detuvo, ambos grupos aumentaron de peso, pero el grupo CON ganó el doble de grasa que el grupo INT; en fin, la dieta intermitente dio como resultado una menor reducción en la quema de energía (el gasto de energía en reposo) que la dieta regular, aunque los investigadores no pudieron determinar exactamente porque sucedió esto.
La dieta intermitente, en bloques alternos de 2 semanas de restricción energética y balance energético, resultó en una mayor pérdida de peso (pérdida de grasa) sin mayor pérdida de masa magra muscular y atenuación de la reducción del gasto de energía en reposo después de 6 meses, en comparación con una dieta equivalente de restricción energética continua, resumieron los investigadores.
Si bien las reducciones adaptativas en el gasto de energía en reposo se atenuaron utilizando este enfoque de dieta intermitente (2:2), es posible que una mayor pérdida de peso en el grupo INT también se deba a una menor compensación en otras funciones energéticas como el efecto térmico de los alimentos y gasto energético de la actividad física. Aunque se necesita trabajo adicional para investigar más a fondo las bases mecánicas de este nuevo enfoque de dieta intermitente, estos hallazgos proporcionan un soporte preliminar para el modelo como una alternativa superior a la dieta de restricción de energía continua, la cual sigue siendo popular en detrimento del propio metabolismo o la masa muscular.