La dieta baja en carbohidratos y la reducción de grasas en el hígado
Gracias a un nuevo estudio clínico se comprobó que se puede tener grandes dividendos al seguir un determinado plan nutricional
Después de muchas investigaciones realizadas sobre diversos tipos de dietas, un grupo de científicos comparó la dieta baja en carbohidratos con una dieta baja en calorías descubriéndose que en la dieta baja en calorías tuvo un error grave; finalmente ellos entraron con una hipótesis de que tal vez, sólo tal vez, una dieta baja en carbohidratos puede ser útil y los resultados hablan por sí quedando la paradoja de que si este estudio tuvo realmente el interés de investigar las ventajas de una dieta baja en carbohidratos sin la suposición de que dietas baja en calorías son mejores.
Aun así, aún el lenguaje utilizado en el comunicado de la prensa parece un poco engañador: “las personas que se encuentran en dietas baja en carbohidratos son más dependientes de la oxidación de grasa en el hígado para obtener energía en comparación con aquellas que se encuentran en una dieta baja en calorías” y aunque eso sonaría casi como algo negativo, no lo es ?
El equipo de la UT Southwestern Medical Center, liderado por los doctores Jeffrey Browning y Shawn Burgess examinó los efectos de la dieta en la producción y utilización de glucosa en el hígado.
- Como ya sabemos, la glucosa y la grasa son metabolizados en el hígado y convertida en energía para nuestros cuerpos.
- La glucosa puede venir del lactato, aminoácidos, o a partir de glicógeno (carboidratos alimentos y azúcares).
- Los científicos separaron aleatoriamente a 14 adultos con sobrepeso, con dietas baja en carbohidratos y dieta baja en calorías.
- Tras dos semanas, ellos analizaron las vías bioquímicas que cada grupo utilizó para hacer la glucosa.
El grupo de bajos carbohidratos obtienen la mayoría de la glucosa del lactato o aminoácidos, y la dieta baja en calorías permite obtener cerca del 40% de su glucosa de los carbohidratos ingeridos; pero el descubrimiento realmente interesante fue que los individuos que siguieron la dieta baja en carbohidratos no tenían mucho glucógeno para quemar, entonces el hígado comenzó a quemar grasa para producir energía, especialmente la grasa en el hígado.
Los resultados indican que las persona que siguieron la dieta baja en carbohidratos tuvieron una mayor quema de grasa corporal en todo el cuerpo y esto probablemente puede ser explicado por el hígado graso que es “liberado” para hacer un mejor trabajo en remover el exceso de grasa.
- Un hígado graso no puede procesar insulina efectivamente.
- Al reducir los carbohidratos se quema la grasa en el higado que por su parte permite procesar más insulina y finalmente reducir los niveles de insulina y disminuir así la acumulación de grasa.
Perder grasa como ya sabemos, no es sólo una ventaja estética sino un beneficio para nuestra salud en general y no es que los señores Browning y Burgess felizmente sospechan que una dieta baja en carbohidratos puede pagar dividendos enormes para las personas con enfermedades hepáticas no-alcoólicas (NAFLD), que es causada por «sorpresa» por el exceso de grasa en el hígado.
