El Internet en exceso podría atrofiar el cerebro
Una neurocientífica británica cita que la actividad física debe romper los esquemas
La investigadora británica Susan Greenfield afirma que las nuevas tecnologías pueden causar atrofia cerebral en niños o adolescentes que dedican demasiado tiempo a juegos de ordenador, redes sociales y a navegar en internet en general, según una entrevista que dio recientemente a la revista New Scientist; recordemos que el enfoque mental es lo más importante no solo para el entrenamiento, sino para el desarrollo de la vida misma.
La especialista en neurología y baronesa británica de la House of Lords considera que se debe restringir el acceso a internet a los jóvenes limitando el horario y aunque las tecnologías poseen inmensos aspectos positivos, también se debe incluir en la rutina diaria la actividad física que estimule al cerebro a funcionar correctamente.
En otro estudio chino, publicado en la PLoS One, se extrajo una investigación que se hizo con 18 adolescentes viciados por la internet; en las pruebas se examinó sus cerebros notando una serie de alteraciones morfológicas proporcionales durante el periodo de tiempo en que estaban navegando en internet.
La científica subrayó que existen muchas evidencias de que el cerebro humano puede modificarse y el ambiente puede modificarlo; la solución según la investigadora pasa por crear un ambiente 3D o aprovechar la tecnología en donde se incluyan movimientos que estimulen el sistema neuromuscular incluyendo aplicaciones portátiles que acompañen el proceso diario de entretenimientos, la práctica deportiva, o el propio entrenamiento en el gimnasio.
Los científicos que niegan los daños cerebrales causados por el exceso de internet se comparan con aquellos que negaban los malefícios del tabaco hace 20 años; y para ello se debería empezar a tener en cuenta dentro del mundo tecnológico nuevas opciones que rompan con el sedentarismo mental.
Para seguir un entrenamiento de musculación o fitness se requiere de un enfoque mental óptimo y si esto se rompe con los excesos frente al ordenador, puede destruir no solo el plan de entrenamiento sino a la salud emocional y física del individuo.