Científicos americanos analizan cómo los planes nutricionales deben ser enfocados por todos durante la batalla ante el COVID-19.
El distanciamiento social y el lavado de manos regular, así como la desinfección son los métodos más efectivos y probados para reducir el riesgo y la propagación de la enfermedad por coronavirus (COVID-19).
Sin embargo, junto con las preguntas generales sobre cómo comprar y preparar alimentos de manera segura, muchos nos preguntan sobre el papel más específico de la dieta y la nutrición durante esta pandemia.
En una entrevista publicada en la prestigiosa “Nutrition News Hardvard TH Chan” se divulgó las recomendaciones para comprender más el vínculo entre la nutrición y la inmunidad, y la evidencia existente sobre el estado de los nutrientes.
La relación entre nutrición e inmunidad
Hace mucho tiempo que sabemos que la nutrición está estrechamente relacionada con la inmunidad y con el riesgo y la gravedad de las infecciones.
- Las personas mal alimentadas tienen un mayor riesgo de varias infecciones bacterianas, virales y de otro tipo.
- Por el contrario, las infecciones crónicas o graves conducen a trastornos nutricionales o empeoran el estado nutricional de las personas afectadas.
En este plano, los científicos de esta universidad citan que es imprescindible que todos prestemos atención a la dieta y estado nutricional en este período.
LA NUTRICION Y LA INMUNIDAD VAN DE LA MANO
El curso clínico de la enfermedad COVID-19 tiende a ser más severo entre las personas mayores y entre las personas con afecciones crónicas, como diabetes, hipertensión y cáncer, que según esta investigación y otras, están en parte relacionadas con la nutrición.
- Aunque los datos aún no están disponibles, las co-infecciones, como el VIH o la neumonía, también requieren de una nutrición óptima.
- De hecho, consumir dietas de buena calidad siempre es deseable, y esto es particularmente importante durante la pandemia.
¿Qué dieta seguir en casa?
Una dieta saludable, enfatiza las frutas, verduras, granos integrales, legumbres y nueces, el consumo moderado de pescado, productos lácteos y aves de corral, y la ingesta limitada de carne roja y procesada, carbohidratos refinados y azúcar. Las grasas agregadas deben ser principalmente aceites líquidos como el aceite de oliva, de canola o de soja.
- Dicha dieta proporcionará cantidades apropiadas de macronutrientes saludables y minerales y vitaminas esenciales, que puede ser útil para las defensas.
- Consumir fuentes de proteínas, grasas y carbohidratos de alta calidad puede ayudar a mantener un peso saludable y un buen estado metabólico.
Este no es un momento para dietas de choque altamente restrictivas y si alguien desarrolla una infección por COVID-19, según el estudio en cuestión, es importante consumir suficiente cantidad de estas calorías saludables para prevenir la pérdida de peso involuntaria.
- Las cantidades adecuadas de minerales y vitaminas proporcionadas por una dieta saludable ayudan a garantizar un número suficiente de células inmunes y anticuerpos, que son importantes a medida que el cuerpo aumenta la respuesta a la infección.
Aunque estos científicos y otros no conocen aun datos concretos sobre los efectos de los suplementos nutricionales relacionados a cómo tratar o evitar el COVID-19, la evidencia existente indica que los suplementos de varios nutrientes pueden reducir el riesgo o la gravedad de algunas infecciones virales, particularmente entre personas con fuentes dietéticas inadecuadas.
Por lo tanto, se sugiere que haya una ingesta adecuada de minerales y vitaminas esenciales esté o no la persona afectada por el COVID-19.
Fuente
- Nutrition News Hardvard TH Chan: Ask the Expert: The role of diet and nutritional supplements during COVID-19