Como curar el dolor crónico
Una de las consultas más interesantes que se puede hacer a los profesionales
Muchas personas, sean atletas o no, aficionados o profesionales, se enferman o pasan por periodos penosos donde los dolores crónicos son imposibles de aguantar, es así que la medicina en una gran cantidad de casos lo consideran intratables; pero es necesario evolucionar pasando del tratamiento básico o el simple alivio de los síntomas del dolor, a una opción real que diferencie el dolor tratable del dolor no tratable.
Las técnicas mínimamente invasivas para tratar el dolor en hernias discales, artrosis, síndrome de túnel cárpico, dolores de los ligamentos, o los problemas articulares que forman parte de los dolores crónicos afectan significativamente la calidad de vida y en estos casos, la radiofrecuencia, la nucleoplastia, la vertebroplastia o la ozonoterapia pueden ser alternativas interesantes.
Para los casos refractários y más difíciles, la tecnología disponibiliza alternativas como la neuroestimulación y la colocación de bombas minúsculas que incrustadas en el cuerpo (como un pacemaker) permiten controlar el dolor de una forma eficaz.
La Ozonoterapia
Es una técnica percutánea que está compuesta por procedimientos que permiten un alta después de una hora y duran de 30 a 60 minutos; en sí el gas ozono es inyectado a través de una aguja de pequeño calibre, infiltrándose tanto a nivel del núcleo del disco, como a nivel de los músculos paravertebrales favoreciendo la rehidratación y la reducción del conflicto disco-radicular, eliminado la sensación de dolor.
El ozono es un gas seguro, no tóxico y puede administrarse con seguridad, favoreciendo el tratamiento del dolor y la disminución de la inflamación.
La Nucleoplastia
Es también una técnica mínimamente invasiva, percutánea, utilizada en hernias discales, problemas en las cervicales o lumbares; es un procedimiento que consiste en descomprimir el disco herniado mediante la inserción de una aguja cuya punta, al liberar temperatura entre 40º a 70º provoca disminución del núcleo del disco, reduciendo la compresión.
La Radiofrecuencia
Es recomendada para el síndrome golpe del conejo (cuando las personas sufren un accidente de automóvil u otro que origina dolores a nivel del cuello y miembros superiores); también se usa para cuando aparece la artrosis o inestabilidad en la columna vertebral, dolores post-quirúrgicos en la zona lumbar o las propias hernias discales.
Después de poner una anestesia local, el médico inserta una aguja con una punta especial que emite radiofrecuencia y hace que los nervios bloqueando el envío de estímulos dolorosos al cerebro.
La Vertebroplastia
Está indicada para situaciones de colapso provocado por osteoporosis, metástasis ósea o traumas diversos; la técnica consiste en la reconstrucción de vértebras fracturadas en la secuencia de osteoporosis, metástases tumorales en otras áreas del cuerpo o donde aparecen traumatismos, permitiendo también estabilizar y fortalecer las vértebras lumbares y toráxicas.
La entrada de la aguja es hecha a través de la piel hasta penetrar en la vértebra para hacer el llenado con un cemento especial para el fortalecimiento óseo.