Baja de peso tomando agua cuando tienes sed
Si puedes enseñarte a ti mismo a beber agua corriente del grifo cuando tienes sed, evitando los zumos y refrescos, será más fácil para ti alcanzar y mantener un peso saludable; cada vaso de agua que bebe cada día vale cerca de 70 kilocalorías, según los epidemiólogos estadounidenses Rupeng An y Jennifer McCaffrey que trabajaron en un estudio hecho con datos de 18.311 adultos estadounidenses que habían sido seguidos de 2005 a 2012 durante la Encuesta Nacional de Exámenes de Salud y Nutrición.
En este estudio observaron como la dieta de los participantes se fue modificando cuando empezaban a beber más agua en lugar de otras bebidas. En todos los casos, con cada vaso de agua que bebían diariamente, la dieta iba mejorando; los investigadores pudieron calcular así que por cada vaso de agua que tomaban en sustitución de una bebida diferente, el consumo total de energía disminuía en 69 kilocalorías, porque la mayoría de ellas están en forma de azúcares.
En realidad el agua es un sustituto de los refrescos, pero aquí no ser termina la historia, porque el agua funciona como un extinguidor de la sed y también conduce a una reducción en el consumo de otros alimentos menos saludables. Hablamos de consumir menos galletas, pasteles, helados, chocolate y otros dulces, así como frituras, papas fritas o carnes grasientas en forma de hamburguesas o pizzas por ejemplo.
En conclusión, el presente estudio examinó el consumo de agua en relación con el consumo de energía/nutrientes y la calidad de la dieta entre los adultos de EE.UU. utilizando nacionalmente datos representativos, lo que proporciona un carácter global y formal científicamente hablando. En este caso se demostró que un aumento en la proporción de agua corriente diaria dentro de la dieta se asocia con una disminución de la ingesta diaria de energía total.
Entonces, promover la ingesta de agua puede ser una estrategia de salud pública útil para reducir la energía y el consumo de nutrientes vacíos, lo que merece confirmación en futuras intervenciones controladas.
La relación del consumo de agua en la dieta
El estudio publicado en The Official Journal of The British Dietetic Association muestra un aumento de un punto porcentual en la proporción de agua corriente diaria consumida que se asoció con una reducción de la ingesta diaria total de energía de 8.58 (7.87-9.29) kcal, pero también se tomó en cuenta otros indicadores:
- Reducción del consumo de energía de bebidas azucaradas de 1,43 (1,27-1,59) kcal,
- Menos ingesta energética de los alimentos no saludables de 0,88 (0,44-1,32) kcal,
- Un menor consumo total de grasa de 0,21 (0,17-0,25) g, incluida menos grasas saturadas de 0,07 (0,06-0,09) g.
- La ingesta de azúcar disminuyó en 0,74 (0,67-0,82) g, mientras que la ingesta de sodio se redujo 9,80 (8,20-11,39) mg y la ingesta de colesterol 0,88 (0,64-1,13) g.
En la figura se puede observar el impacto sobre estos indicadores con tres vasos de agua por día, que indica la importancia de la ingesta de agua sobre la dieta en forma directa y con mucho más preponderancia de lo que pensábamos.
Los efectos de la ingesta de agua corriente en la dieta fueron similares entre varios grupos étnicos, nivel educativo, nivel de ingresos y peso corporal, pero fueron mayores entre los hombres y los adultos jóvenes de mediana edad que entre las mujeres y los adultos mayores, respectivamente. Lo interesante fue también observar que la calidad del agua ingerida no tuvo diferencias significativas, aunque se añaden tres estudios vinculados que fueron desarrollados por nuestros investigadores.
Fuente
- The Official Journal of The British Dietetic Association: Plain water consumption in relation to energy intake and diet quality
