Adaptaciones Cardiovasculares
La salud del corazón está perfectamente integrada a los ejercicios aeróbicos como anaeróbicos con el apoyo del cuidado de la mente y el espíritu
La práctica actual del conocimiento no permite afirmar que solo los ejercicios aeróbicos presentan beneficios cardiovasculares y para analizar ese tema, dos aspectos deben ser considerados: la salud y la aptitud; estudios epidemiológicos documentan que la salud cardiovascular es estimulada por la actividad física, independientemente de haber mejora de parámetros de aptitud hemodinámicos produce efectos saludables que parecen estar relacionados con la más pequeña incidencia de sobrepeso, diabetes, arterosclerosis, hipertensión arterial, trombosis vascular, ansiedad y depresión.
El organismo físico y su relación con el corazón
Los mecanismos envueltos ya identificados son:
- La elevación de la tasa metabólica debido al aumento de masa muscular.
- La tendencia hacia el balance calórico negativo.
- El aumento de la sensibilidad de las células a la insulina.
- El estímulo del metabolismo de los carbohidratos.
- La mejora del perfil lipídico de la sangre.
- La reducción de la sensibilidad de las macetas y del miocardio a la acción de la adrenalina.
- La reducción de la agregación plaquetaria.
- La reducción del estrés emocional.
De este modo desde punto de vista de la salud cardiovascular, cualquier tipo de actividad física es útil al ser compatible con los niveles de aptitud de la persona y todos los efectos saludables anteriormente citados ya fueron demostrados y también con relación a los ejercicios con pesas; adicionalmente se acepta que por lo menos con relación a la actividad física deportiva ocurre estímulos ambientales para que se evite el tabaquismo, el alcoholismo, uso de sustancias no naturales, los excesos alimenticios y la falta de reposo.
En lo que concierne a la aptitud física, los ejercicios aeróbicos son reconocidamente superiores a los ejercicios con pesas para el objetivo de estimular las adaptaciones hemodinámicas y en el sistema de transporte de oxígeno; sin embargo, el entrenamiento con pesas produce la mejora de varios parámetros hemodinámicos, aunque en el caso de algunos de ellos, de manera menos marcante comparativamente al entrenamiento con ejercicios contínuos; y entre esos parámetros están:
- La reducción de la frecuencia cardíaca.
- La reducción de la presión arterial.
- La reducción del consumo de oxígeno por el miocardio evaluada por el doble-producto (presión arterial sistólica x frecuencia cardíaca).
- Aumento del volumen sistólico y mejora de indicadores de la función sistólica y diastólica.
Debe quedar claro también que los diversos parámetros de aptitud aeróbica y hemodinámica no evalúan salud, pero sí la aptitud para determinados tipos de esfuerzos físicos.
- Además se demostró que confirmando el principio de la especificidad del entrenamiento, las adaptaciones cardiovasculares de atletas de resistencia son inadecuadas para el buen desempeño hemodinámico en esfuerzos isométricos intensos, al contrario de lo que ocurre con atletas entrenados con pesas.
- Los esfuerzos isométricos son comunes en la vida diaria de todas las personas.
La sobrecarga de volumen sanguíneo proporcionada por el entrenamiento con ejercicios contínuos lleva a las adaptaciones anatómicas cardiacas diferentes de las proporcionadas por la sobrecarga de presión de los ejercicios con pesas.
- Básicamente los ejercicios contínuos producen más pequeña hipertrofia de las paredes del corazón y mayor aumento de cámaras cardiacas comparativamente a los ejercicios con pesas.
- La mayor hipertrofia del miocardio producida por los ejercicios con pesas es fisiológica, no acompañándose de las complicaciones de la hipertrofia patológica producida por la hipertensión arterial crónica.
- Las cámaras cardiacas pueden aumentar o no durante el entrenamiento de fuerza pero nunca disminuyen como puede ocurrir en la enfermedad hipertensiva; evidentemente los atletas de cualquier modalidad que presenten hipertensión arterial esencial o no, pueden presentar hipertrofia patológica del miocardio paralelamente a las adaptaciones del entrenamiento.
La mente además debe ser inducida a modelar los pensamientos de modo a que la tendencia a moderar tanto la nutrición como el estado de ánimo y la organización personal puedan incidir positivamente en el sistema nervicio central, evitando los momentos de estrés y así protegerse de cualquier inconveniente cardiovascular.