La actividad física ayuda a aliviar el asma
Los bronquios se dilatan y además se libera toxinas del organismo
La actividad física y principalmente la musculación previene y ayuda en muchos casos de enfermedades; el gran ejemplo que ponemos a consideración es su impacto sobre el asma, y con este concepto de la vida real observamos como el gimnasio no solo es el sitio para los gigantes sino un lugar donde se puede además de liberar las tensiones de la vida diaria, curar efectivamente algunas enfermedades levantando pesas.
La dificultad en respirar es uno de los grandes problemas de quienes sufren asma, pero con la musculación los bronquios se dilatan y producen una verdadera mejoría; la época del año que más aumenta esos casos son al inicio del otoño y en invierno siendo de fundamental importancia consultar con los médicos la opción de ir al gimnasio después de realizar algunos test físicos y generales.
Aunque exista una barrera psicológica sobre los asmáticos y el entrenamiento con pesas por el hecho de que se mira como una actividad pesada que afectará negativamente al organismo, la ciencia demostró que cuando técnicamente se desarrolla un programa de pesas diferenciado al conocido «hardcore» que visa la hipertrofia, lo ideal es fortalecer el cuerpo y mejorar la respiración con la ventaja adicional de liberar las toxinas presentes en el organismo mediante el sudor.
