El calor para destruir las células malignas
Nueva nanoherramienta para la medicina moderna diseñada por ibéricos
Un grupo de investigadores portugueses y españoles que se contactaron con MASmusculo desarrollaron un nuevo dispositivo, cien mil veces más pequeño que un milímetro, con potencial aplicación en nanomedicina; se trata de una nanoherramienta que junta nanopartículas de oro cuya finalidad es liberar calor al absorber luz infrarroja (nanocalentadores) y nanocilindros de óxidos de metales lantanídeos.
Estos últimos elementos emiten luz visible cuya intensidad varía con la temperatura (nanotermómetros); la nanoplataforma ibérica constituye un avance tecnológico único porque permite medir con gran precisión, a la escala del nanómetro, el aumento de temperatura provocado por la absorción de luz infrarroja por las nanopartículas metálicas de oro y el calentamiento local causado por la absorción de luz por nanopartículas de ciertos metales tiene incontables aplicaciones en sensores fotovoltaicos, en la liberación controlada de fármacos y en hipertermia.
En esta forma de terapia son usadas nanopartículas, por ejemplo de oro, que después de administración a una persona enferma se acumulan en las células de ciertos tumores; la irradiación de esos tejidos con luz infrarroja y su absorción por las nanopartículas provoca, por calentamiento, la muerte de las células tumorales, lo que puede ser extraordinario e inédito.
Es, pues, importante medir la temperatura local de las nanopartículas evitando, específicamente que el calor liberado destruya también células benignas; reside aquí la principal novedad del trabajo porque la nanoherramienta, que inventaron, abre la perspetiva de simultáneamente poderse calentar y medir la temperatura de las células y esto puede inclusive ser muy importante para la medicina deportiva.
Los científicos esperan que en un mañana no muy lejano, “sea direccionada exactamente para célula malignas destruyéndolas a través de calor, controlando el aumento de temperatura, sin necesidad de que el enfermo tenga que recurrir a las terapias convencionales que acaban también por afectar células saludables”.
La investigación hecha por científicos de la Universidad lusa de Aveiro y las Universidades españolas de Vigo y de San Sebastián, y que estará disponible en la prestigiosa revista Advanced Materials cita que la nanoherramienta aún no fue probada en células, pero se indica que los próximos pasos serían hacerlo en células laboratoriales y posteriormente en animales.