Un culturista, vitaminas inyectables, lesión renal y catabolismo
No muchos culturistas que conocemos usan vitaminas inyectables que en realidad son para el ganado; gracias a Dios no pudimos evitar pasar un tema que no debe ser controversial, como es el uso de drogas. Un artículo desarrollado por la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas en Lima han publicado un estudio que quizás sea horrorífico pero muestra la verdad en el uso de vitaminas inyectables; los resultados están disponibles en la revista “Nefrología”.
El estudio que indica el efecto de las drogas se basa en un culturista masculino de 30 años que fue al hospital porque tenía dolor epigástrico severo, náuseas y vómitos; él confesó que había estado usando esteroides anabólicos e inyecciones con vitaminas A y D durante 4 años. Cada mes se había inyectado una formulación veterinaria que contenía 2,1 millones de unidades de vitamina A, 60,000 unidades de vitamina D y 55 unidades de vitamina E; además, el hombre también se inyectó durante dos años un aceite mineral cosmético y de aumento muscular.
En su sangre, los médicos encontraron demasiada PTH y demasiado calcio, además en las exploraciones los médicos observan que los riñones estaban afectados, descubriendo cálculos renales. Los médicos sospecharon que las drogas, especialmente la vitamina A inyectada, y quizás también la vitamina D, ha aumentado los niveles de calcio, y que esos niveles hacen que las partes vitales de los riñones calcifiquen.
Una intoxicación por el uso de drogas puede haber tenido un papel principal en el desarrollo de la hipercalcemia y en sí misma pudo haber aumentado la secreción de PTH6; la hiperactividad paratiroidea se ha descrito en enfermedades críticas asociadas con sepsis e insuficiencia renal (hiperparatiroidismo terciario potencialmente mortal).
El vómito prolongado del culturista le causaba lágrimas en las entrañas; estas y otras complicaciones causaron infecciones, que hicieron que permanezca en el hospital durante dos meses. Los médicos lo trataron con corticosteroides, furosemida e infusiones de solución salina hasta que sus riñones se recuperen, pero a pesar de ese peso extra de músculos que consiguió, la lesión renal le complicó la vida.
El hiperparatiroidismo primario de adenoma o hiperplasia se excluyó mediante estudios de imagen negativos y la restauración del calcio sérico y la PTH a niveles normales después de la interrupción del tratamiento de drogas. Finalmente, en el caso reportado aquí hubo una peculiar afectación del cuello y los brazos debido a la autoinyección de aceite mineral, más aparente después de la significativa pérdida de peso observada (más de 30 kg) por el paciente.
La biopsia de la piel afectada reveló células gigantes multinucleadas e infiltrados inflamatorios; estas lesiones, llamadas parafinomas, pueden haber contribuido a la hipercalcemia debida a la producción extrarrenal independiente de PTH de 1,25-dihidroxi-vitamina D por células mononucleares activadas; es complejo pero a la vez es simple cuando hablamos de drogas.
Cuando el hombre fue dado de alta del hospital no solo había perdido más de 30 kg, sino que su sistema inmunológico y su microbiota intestinal estaban débiles; en este escenario los médicos citan que todos deben ser conscientes de que los esteroides anabólicos y el abuso de multivitaminas pueden ocurrir con relativa frecuencia y su uso debe ser evitado. La aparición simultánea de nefrocalcinosis, nefrolitiasis, lesión renal aguda y pancreatitis aguda puede estar relacionada con el diagnóstico de hipercalcemia crónica asociada, lo que destruye la vida del propio atleta a mediano plazo.