El ajo y la circulación sanguínea
La fitoterapia funciona como medicina tradicional desde hace mucho tiempo; durante la historia se usó para mejorar la circulación sanguínea cuando hay problemas en los miembros superiores e inferiores sobre todo; a través de las propiedades depurativas de los vegetales por ejemplo, se logra reducir la capacidad coagulante de la sangre, combatiendo la retención de líquidos y eliminando las toxinas que pasan por el torrente sanguíneo.
La circulación sanguínea lleva nutrientes y oxígeno a los tejidos del cuerpo, pero también expulsa los tóxicos, por tanto es fundamental mantenerla saludable en todos los aspectos. Existe lo que se llama circulación venosa (retira el desecho y dióxido de carbono de la sangre) y la circulación arterial (la responsable de transportar la sangre con nutrientes y oxígeno a los tejidos).
Los problemas surgen con las venas que tienen una pared elástica, además de válvulas para el retorno de la sangre; el buen estado de las mismas hacen que todo vaya bien desde el bienestar hasta rendir al máximo cuando se entrena o se desarrolla la síntesis proteica, en el proceso de regeneración de los tejidos musculares; obviamente el sistema cardiovascular y los músculos dependen de la buena circulación sanguínea, pero la insuficiencia venosa dada por piernas abultadas o adoloridas, hormigueos o várices e, incluso enrojecimiento de tobillos o piernas pueden derrumbar no solo el plan de entreno, sino la calidad de vida.
Los poderes del ajo en la circulación sanguínea
La homocisteína se relaciona directamente con las enfermedades cardiovasculares o los problemas de vascularidad a nivel general; la vitamina B reduce los niveles de homocisteína que en sí, hace que la sangre sea espesa y pueda formar coágulos y, por consecuencia llegar a la trombosis. El ajo posee suficiente vitamina B para inhibir el proceso de aumento de la homocisteína, haciendo que la circulación sanguínea llegue a ser eficiente; lo logra gracias a un activo que está presente en el ajo llamado aliina y otros compuestos sulfurosos.
Un estudio sobre este compuesto muestra que disuelve la acumulación de calcio en el corazón y las arterias; eso puede ayudar a reducir un riesgo de un ataque al corazón, pero también reduce otros factores de riesgo como la presión arterial alta, el colesterol y la agregación plaquetaria que pueden formar coágulos de sangre (2).
Los investigadores americanos querían saber el efecto de comer verduras con aliina (ajo, cebollas, cebollino chino y chalotas) sobre el riesgo de accidente cerebrovascular; en fin para ello reclutaron a 125 pacientes con problemas circulatorios y les pidieron que completaran cuestionarios de alimentos. En particular, preguntaron con qué frecuencia los pacientes comían hortalizas y ajo en particular; posteriormente, los investigadores midieron el flujo sanguíneo en las arterias del brazo de cada paciente usando ultrasonido de alta resolución.
Los resultados fueron claros; los investigadores podían predecir el flujo sanguíneo basado sólo en la cantidad de aliina y en especial cuando consumían ajo con frecuencia; los pacientes que comían menos ajo tenían una circulación más pobre y los que comían más ajo tenían mejor circulación.
Lo que pasaba era que sus glóbulos rojos absorbían compuestos de azufre del ajo para formar el sulfuro de hidrógeno, que hace que los vasos sanguíneos se expandan, equilibren la presión sanguínea y aumenten el flujo sanguíneo, lo que es bueno para el corazón y la circulación sanguínea, incluido el rendimiento en el gimnasio o en el romance.
El ajo y su acción vasodilatadora
Un estudio publicado en el Journal of Nutritional Biochemistry desarrollado en el año 2004 (1) mostró que existe una considerable evidencia epidemiológica y clínica de que la suplementación regular con ajo reduce el riesgo cardiovascular mejorando la circulación sanguínea. En este estudio, se ha investigado la hipótesis de que un extracto de ajo aumenta el flujo sanguíneo del tejido y esto está mediado por las acciones vasodilatadoras de la interleucina-6 (IL-6); los resultados se dieron después de obtener muestras por pletismografía de oclusión venosa para medir el flujo sanguíneo de los gemelos en reposo, antes y después de la administración oral de 600 mg de comprimidos de ajo una vez al día durante 7 días.
- Las concentraciones plasmáticas de IL-6 aumentaron significativamente de 54.6 (32.3 a 151.6) mcg/mL antes a 151 (135.75 a 422.3) mcg /mL después de 7 días de consumo del extracto de ajo (P = 0.02).
- Sin embargo, no hubo cambios significativos en los niveles plasmáticos de nitrato, nitrito y c-GMP después de consumir ajo (P = 0,4, 0,9 y 0,65 respectivamente).
- En el grupo control, el flujo sanguíneo en reposo de los gemelos y los niveles plasmáticos de IL-6, nitrito, nitrato y c-GMP permanecieron sin cambios después de 7 días (p = 0,62, 0,92, 0,28 y 0,35, respectivamente).
En este estudio sobre circulación sanguínea, el flujo de sangre de los gemelos mostró una correlación no lineal con los niveles plasmáticos de IL-6 después de la suplementación con ajo (r = 0,86, p = <0,001) pero no antes. (1)
Fuentes
- Publ Med US: Garlic supplementation increases peripheral blood flow: a role for interleukin-6?
- Disvovery Health Pub Research: Eating More Garlic Improves Blood Flow