La mejor dieta para tu estilo de vida
Todos estamos conscientes de que seguir una dieta estricta puede ser difícil y, el aumento de tu actividad física sin comer los alimentos adecuados, en las cantidades adecuadas no es suficiente para lograr tus objetivos de pérdida de peso. Nuestros expertos en nutrición deportiva citan que seguir una dieta saludable y equilibrada es clave para ayudarte a sentirte mejor y mantenerte en una progresión permanente a largo plazo.
Aunque cada persona tiene diferentes preferencias y metas, con el fin de mantener con éxito un régimen de alimentación saludable, tendrá que encontrar una dieta que se alinea con su estilo de vida. Afortunadamente, para seguir una dieta ideal el factor decisivo en tus decisiones no es tan compleja y se divide entre la carne o los carbohidratos.
Si estás dispuesto a renunciar a los carbohidratos, es probable tener éxito con una dieta cetogénica o Paleo, pero si quieres renunciar a la carne, es posible seguir una dieta vegana/vegetariana y también tener éxito; ahora, si te gusta el equilibrio y la moderación al consumir carne, carbohidratos y verduras, una dieta mediterránea es la mejor opción.
A continuación te presentamos los beneficios, los inconvenientes y los requisitos para estas cuatro dietas populares.
La dieta cetogénica
Similar a la moda de la dieta Atkins, la dieta cetogénica favorece los alimentos ricos en grasa sobre la mayoría de los carbohidratos; aquí, tu cuerpo va a quemar su propia grasa para obtener energía en ausencia de carbohidratos, por lo que es una opción popular para aquellos que buscan perder peso.
Con el fin de dominar la dieta cetogénica, tendrás que planificar diligentemente las comidas y contar las calorías, con un plan de comidas diario que consistirá en:
- 70% de grasas.
- 10% de carbohidratos.
- 20% de proteínas.
Esto equivale a seis porciones de verduras, cuatro porciones de carne o pescado, tres porciones de productos lácteos y dos huevos. Sin embargo, es importante ser consciente de alguno potenciales, incluyendo fatiga, mareos, estreñimiento y dolores de cabeza, por lo cual se debe ir ajustando hasta llegar a un equilibrio permanente.
La dieta Paleo
Como su nombre sugiere, la dieta Paleo se compone de alimentos enteros que emulan la alimentación de la era paleolítica. Esta dieta requiere disciplina y con el fin de mantener una dieta Paleo, tendrás que renunciar a granos, productos lácteos y legumbres; en cambio, deberías aumentar tu consumo de fibra, potasio y antioxidantes.
Esta dieta también ayuda a perder peso y bajar tus niveles de azúcar en la sangre, consistiendo en esta división de macronutrientes:
- 50% de verduras.
- 2% de nueces y semillas.
- 10% de aceites.
- 13% de frutas.
- 25% de carnes y huevos.
Asegúrate de detectar cualquier signo de deficiencia de calcio, mientras estás dentro de una dieta Paleo, siendo necesario un multivitamínico con calcio para equilibrar las cosas.
La dieta mediterránea
Esta dieta es ideal si anhelas un equilibrio entre carnes, verduras y carbohidratos; en lugar de cortar completamente los carbohidratos y granos, puedes disfrutar de estos alimentos con moderación y optar por granos enteros.
En una dieta mediterránea, tu dieta consistirá de alimentos enteros, un montón de verduras, granos enteros y carnes magras y pescado, siempre con moderación. Para lograr el éxito con una dieta mediterránea, deberías sustituir la mantequilla con aceite de oliva y sal con hierbas y ajo, siendo necesario respetar algunas cosas en forma diaria:
- Ocho porciones de granos.
- Seis porciones de verduras.
- Tres porciones de fruta.
- Dos porciones de productos lácteos.
Semanalmente, incluye seis porciones de pescado, cuatro porciones de leguminosas, cuatro porciones de aves de corral, tres porciones de huevos y una porción de carne roja preferentemente magra.
La dieta vegetariana
A menudo, las personas que siguen una dieta vegana/vegetariana por razones ambientales o éticas, para optar por no comer carnes y subproductos animales. Sin embargo, si sigues una dieta vegana/vegetariana puedes aumentar tu consumo de fibras, ácido fólico y vitaminas C y E.
Los veganos/vegetarianos también disfrutan de una dieta baja en grasas no saturadas, un bajo IMC y un peso saludable; el veganismo es una dieta a base de plantas con un plan diario de comidas consistente en:
- Ocho porciones de granos.
- Cuatro porciones de leguminosas.
- Tres porciones de verduras.
- Tres porciones de fruta.
Los suplementos son a menudo necesarios para las dietas veganas para compensar el calcio, la vitamina D, la vitamina B12 y la deficiencia de hierro; así mismo hay que tener en cuenta el consumo de proteínas vegetales en forma de suplemento específicamente tanto en batidos o mediante algunas semillas altas en proteínas como las de calabaza, chía o girasol.
Conclusiones sobre la dieta y tu estilo de vida
Una vez que hayas decidido sobre la dieta que mejor se adapte a tu estilo de vida, hay algunos consejos para tener en cuenta para asegurarte de que sigas tu nuevo régimen de alimentación en forma saludable.
- Cocina las comidas en casa: los estudios demuestran que hacer esto un mínimo de cinco veces a la semana puede ayudarte a vivir 10 años más. Para extender tus comidas, cocina más de una porción y guarda las sobras para el día siguiente o prepara para unos tres a cuatro días y reservarlas.
- Bebe más agua: consumir un extra de 1,5 litros de agua al día te ayudará a quemar como un suplemento, unas 200 calorías adicionales. Además, beber 0,5 litros de agua antes de una comida te animará a consumir 75 calorías menos.
- Duerme más: descansar al menos de siete horas por noche puede ayudarte a regular las hormonas grelina y cortisol que te hacen sentir apetito.
- Mantén un diario de alimentos: registrar tu comida seis días a la semana te asegurará de que estás adaptándote a tu nueva dieta, mantener el bienestar y el buen humor.
- Planifica las comidas por adelantado: para evitar la tentación por otras comidas y no saludables, planifica tu menú semanal con antelación.
Seguir consejos te asegurarán perder peso, aumentar tus niveles de energía y mejorar tu salud; en combinación con el ejercicio, serás capaz de alcanzar rápidamente las metas que has establecido para tu salud y composición corporal en forma definitiva.