La dieta restrictiva en calorías, Parte 3
Cuando hablamos de una dieta restrictiva en calorías, nos referimos a una práctica en la que los individuos restringen sus calorías por debajo de lo normal en un esfuerzo por lograr la longevidad y beneficios para la salud. Los estudios en animales muestran que la restricción calórica puede prolongar la vida útil y reducir el riesgo de enfermedad; un estudio a gran escala llamado “CALERIE”, hecho en la Universidad de Tufts encontró que los individuos de peso normal que redujeron la ingesta energética en un 25% durante 2 años, redujeron el peso corporal y experimentaron una serie de efectos positivos para la salud y el mental. Un mejor estado de ánimo, produjo menor presión arterial, mejor sueño y bienestar general.
La principal diferencia entre el “Estudio CALERIE” con los demás, como el “Estudio Minnesota” es el grado de restricción de calorías; el estudio “CALERIE” disminuyó la ingesta de energía en un cuarto, y la ingesta de calorías fue personalizada, con tasas metabólicas y niveles de actividad promedio bien determinados, con el fin de determinar las necesidades de calorías en la dieta restrictiva en calorías.
Por ejemplo,
- Un hombre en promedio en este estudio normalmente quemaba 3.300 calorías, redujo a 2.500 calorías su ingesta diaria para el estudio “CALERIE”;
- Una chica en promedio normalmente quemaba 2.226 calorías, con una ingesta de energía reducida a 1.670 calorías
En el “Estudio Minnesota”, probablemente los hombres eran mucho más activos físicamente basándose en sus actividades; también es de destacar que a algunos individuos del “Estudio CALERIE” se les pidió que salieran del experimento porque estaban desarrollando anemia o pérdida de minerales óseos, mostrando que incluso una restricción moderada en calorías no es apropiada para todos.
¿Qué podemos sacar de estos estudios?
A primera vista podría parecer que el “Estudio Minnesota” no es relevante para la población con sobrepeso para una dieta restrictiva en calorías, pero hay que considerar los siguientes hechos:
- A pesar de la evidencia de que no funciona para la pérdida de peso a largo plazo, las dietas bajas en calorías y moda siguen siendo populares.
- Es común que las mujeres jóvenes reduzcan las calorías por debajo de 1.200 calorías al día en un esfuerzo por perder grasa corporal.
- Un escalofriante 2/3 de chicas jóvenes que están haciendo dietas activas en un esfuerzo por perder peso
- Las tasas de trastornos alimentarios están aumentando a pesar de una mayor conciencia de los peligros de la dieta reducida en calorías
El mensaje más fuerte de salud pública para combatir la obesidad es «comer menos y moverse más» y que una dieta restrictiva en calorías puede ser saludable si se sabe hacer, lo cual tiende a contradecir el concepto científico demostrado.
La obsesión que la cultura global tiene con el peso corporal se vincula fuertemente con la dieta restrictiva en calorías. Pero como siempre apuntamos, lo más saludable que puedes hacer es tomar un enfoque en el que te esfuerzas para comer consciente e intuitivamente, optar por los alimentos más nutritivos, además de entrenar con pesas, a intervalos de intensidad alternada, dormir bien y alejarte de los vicios, de manera a que mejores tu función física, mental y, por consecuencia, tu composición corporal y situación emocional.
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Fuente
- Charles Poliquin Research: The Dangerous Health Implications of Low Calories Diets