La L-carnitina, para reducir el apetito y la fatiga
Los sentimientos de apetito y fatiga son quizás los factores más prominentes en la resistencia a la pérdida de peso; el presente estudio muestra como la L-carnitina trabaja sobre estos efectos. Para ello se realizó un ensayo aleatorio pequeño en un hospital, en un escenario en donde los voluntarios tuvieron que seguir un plan de restricción intensa de calorías (terapia de ayuno modificada).
A los voluntarios se les prescribió una dieta de 700-800 calorías por día durante los primeros 2 días, seguido de 5 días de 200 calorías por día. En este ensayo de 7 días, los voluntarios recibieron 2 gramos de L-carnitina dos veces al día por inyección intravenosa (grupo l-c) o 30 ml de solución salina como control placebo (grupo placebo).
La medida de resultado primaria en este ensayo fue observar si se produjeron cambios significativos en la pérdida de peso entre los grupos; sin embargo, después de leer las revelaciones de los autores de los estudios que confunden las variables y las limitaciones con respecto a los resultados de la pérdida de peso, nos interesamos específicamente en los resultados secundarios.
Éstos incluyeron el análisis de los niveles percibidos de apetito y fatiga; curiosamente, las puntuaciones de estas medidas percibidas en el grupo que consumió L-carnitina disminuyeron gradualmente durante el ensayo, mientras que las puntuaciones en el grupo de control aumentaron progresivamente. Estos resultados indican que la L-carnitina puede promover la pérdida de peso a través de sus propiedades supresoras del apetito.
Es importante mencionar el método de administración utilizado en este estudio; la infusión de L-carnitina es probable que ejerza efectos acelerados o mejorados en comparación con la suplementación oral. Los estudios que implican el método de administración de la infusión se llevan a cabo típicamente durante el período preliminar al investigar las cualidades terapéuticas potenciales de un nutriente específico, además, la infusión de un nutriente puede realizarse para probar cualquier calidad terapéutica previamente no descubierta (como se observa en este ensayo, sobre los niveles de apetito y fatiga).
En otro estudio reciente en el que se incluyeron jóvenes sanos, se demostró que la suplementación oral de L-carnitina (1,36 g) emparejada con una carga de carbohidratos (80 gramos) dos veces al día aumentaba la carnitina muscular en un promedio del 21% respecto al valor basal, apuntando que sólo la carga de carbohidratos no logró un aumento significativo.
La razón por la que los autores implementaron una carga de carbohidratos fue para promover una respuesta de insulina en el momento de la suplementación de carnitina de modo a facilitar la captación de carnitina muscular (recordando que la insulina es una hormona anabólica), además se pudo demostrar cómo se había teorizado que la carga adicional de carbohidratos hizo que se gane más grasa corporal, mientras al añadir la L-carnitina no se presentó este efecto en forma significativa.
Esta investigación preliminar nos cita que la L-carnitina puede tomar un cierto número de meses para acumularse en el tejido muscular mediante la suplementación oral. Si esto es cierto, los ensayos futuros que utilicen carnitina oral deben coincidir con el período de tiempo y el programa de dosificación requerido para que los músculos alcancen cierto nivel de saturación.
Enlace relacionado: https://www.masmusculo.com/es/30301-l-carnitina
Históricamente, las medidas de resultado más comunes estudiados en los ensayos con carnitina implican principalmente el metabolismo de la glucosa y los lípidos. Hasta la fecha, las medidas de resultado de lípidos y glucosa han mostrado desgraciadamente resultados marginales. Sin embargo, los ensayos de L-carnitina existentes que muestran resultados pobres pueden reflejar una duración corta e inapropiada.
Un meta-análisis reciente con ensayos controlados aleatorios sobre la L-carnitina con respecto a los resultados de glucosa y lípidos identificó que la L-carnitina oral disminuye la glucosa plasmática en ayunas en diabéticos tipo 2 con una dosis moderada. Con este intervalo de confianza, concluiríamos que estos resultados son marginales, pero nos da la esperanza de que con ensayos a largo plazo, las puntuaciones de glucosa en sangre en ayunas podría ser más sustancial.
Los estudios con L-carnitina que miden cualquier perfil alterado de los lípidos han sido aún más marginales y decepcionantes, a menudo sin mostrar mejorías, no obstante, la suplementación con L-carnitina oral pueden mejorar la fisiología mediante el metabolismo de la glucosa, mediante una acción antioxidante que está reconocida por la ciencia y por la disminución del apetito.
A corto plazo, sería mucho más fácil y menos costoso para los investigadores llevar a cabo ensayos sobre cómo la suplementación oral de L-carnitina puede afectar la fatiga y el apetito, lo cual nos da una visión muy amplia sobre este fabuloso suplemento.
Fuentes
- Silicon Valley Fit: Carnitine — a key nutrient in weight loss
- Nutritions Journals: L-carnitine ameliorated fasting-induced fatigue, hunger, and metabolic abnormalities in patients with metabolic syndrome
- Journal of Physiology: Skeletal muscle carnitine loading increases energy expenditure, modulates fuel metabolism gene networks and prevents fat accumulation in humans
