La actividad física en la adolescencia puede reducir el riesgo de problemas mentales
El cerebro controla al cuerpo y por ello se lo debe alimentar desde joven
Los adolescentes físicamente activos presentan riesgos menores de sufran deterioros mentales en la tercera edad, y el efecto del ejercicio físico es más notable en las mujeres, revela un estudio publicado en el Journal of the American Geriatrics Society. En un estudio habían sido utilizados datos de 9.395 mujeres con 65 años o más, que habían sido cuestionadas sobre la regularidad de la práctica de ejercicio durante su adolescencia, de los 30 a los 50 años. Sus funciones cognitivas también fueron evaluadas.
Según los resultados, aquellas que practicaban ejercicio con regularidad en cualquier edad, tuvieron un riesgo menor de debilitaciones mentales, cuando más años pasaban. Sin embargo, los beneficios fueron más visibles en las mujeres que eran activas en la adolescencia. Sólo 8,5 % de las que fueron activas en esa época quedaron mentalmente debilitadas más tarde, en comparación al 16,7% de aquellas que fueron sedentarias en la adolescencia.
Tras ajustar las diferencias entre los grupos y factores de riesgo como la diabetes; los investigadores concluyeron que la actividad física durante la adolescencia estaba asociada a un riesgo 35% menor de debilitación cognitiva posteriormente. Las personas muchas veces separan la mente del cuerpo y olvidan que la actividad física es controlada por el cerebro, refirió Laura E. Middleton, líder del estudio.