Sodio
Regula el equilibrio de los líquidos del cuerpo y contribuye al proceso digestivo
El sodio, ion positivo, es considerado el principal cation presente en el fluido extracelular y representa 2% del total de minerales. Es clasificado como macroelemento o macromineral (necesario en grandes cantidades en el organismo para desempeñar sus funciones). Este mineral es encontrado en el líquido extracelular, donde está combinado al cloro y, cerca de 35 a 40% está presente en los huesos (esqueleto). Las principales fuentes de alimentos de sodio son sal de cocina (cloruro de sodio), peces de agua salada, frutos del mar, carnes por regla general, aves, leche, huevos, alimentos en conserva, carnes saladas (charque, bacalao, entre otras), y alimentos enlatados. No existen suplementos de sodio. Cuando es necesaria su suplementación, se utiliza la sal de cocina a través de la dieta. Soluciones de sales de sodio pueden ser encontradas para la reposición de electrólitos.
Importancia del Sodio
El sodio, en colaboración con el potasio, regula el equilibrio de los líquidos. Contribuye al proceso digestivo manteniendo la presión que ejercen 2 líquidos o gases que se extienden y mezclan a través de una membrana permeable o un tabique (presión osmótica). Al actuar en el interior de las células, participa en la conducción de los impulsos nerviosos. Regula el reparto de agua en el organismo e interviene en la transmisión del impulso nervioso a los músculos.
Es rara su carencia, pero si se produce se manifiesta con deshidratación, mareo y baja presión arterial. Las necesidades aumentan: al tomar diuréticos sobre todo si se utiliza para adelgazar. En casos de ejercicio intenso en época de calor ya que conduce a pérdidas de liquido y también en casos de diarrea o vómitos, se hace necesario ingerir líquidos enriquecidos con sodio.