Fitoquímicos
En las dietas conservadoras se reconoce el bienestar que produce los fitoquímicos
Los fitoquímicos son componentes naturales encontrados en frutas y legumbres. Son sustancias que no encajan en cualesquiera otras categorías, ellos no son vitaminas, proteínas, carbohidratos, grasas o minerales. Aunque no son nutrientes, o necesarios para el sostenimiento de la vida, los fitoquímicos son benéficos para nuestra salud. Cada tipo de fruta o legumbre puede contener cientos de fitoquímicos.
Importancia de los fitoquímicos
Los mismos fitoquímicos que protegen a las plantas también ayudan los humanos que los ingieren. Las investigaciones prueban que tienen propiedades antioxidantes, lo que significa que ellos protegen contra sustancias llamadas «radicales libres», que pueden damnificar las células saludables. Los científicos también están investigando beneficios adicionales como, por ejemplo:
- Parecen proteger contra la arterosclerosis – la acumulación de placas grasas en las paredes de las arterias que puede aumentar el riesgo de infarto y derrame.
- Parecen proteger contra ciertos tipos de cáncer.
Conozca algunos fitoquímicos, su acción y donde encontrarlos:
Sulfatos alílicos: Estas sustancias mejoran el sistema indemne, disminuyen el colesterol sanguíneo y aumentan la producción de enzimas protectoras contra el cáncer. Pueden ser encontradas en los vegetales de la familia allium: ajo y cebolla. Los estudios indican que el ajo también disminuye la agregación plaquetaria y la presión sanguínea.
Indol: Los estudios indican que esta sustancia puede disminuir el riesgo de cáncer de vejiga en los hombres. Se encuentran en el brócoli, repollos y coliflor.
Isoflavonas: Auxilian en la reducción del colesterol y disminuyen la formación de las placas arteriales. Encontradas sobre todo en la soja, tofu, leche de soja y guisante.
Licopenos: Poseen un efecto antioxidante, neutralizando los efectos dañosos de los radicales libres y actuando en la prevención de algunos tipos de cáncer y enfermedades del corazón. La mayor fuente de licopeno es el tomate. Los tomates frescos contienen una gran cantidad, pero el cozimento parece facilitar todavía más su absorción por el organismo. Por ello, es necesario utilizar también zumos y salsas de tomate. Otras fuentes de licopeno incluyen la sandía.
Compuestos fenólicos: Inhiben la formación de las placas arteriales, que contribuyen para el cuidado del corazón. Encontrados en los tomates, frutas cítricas, zanahorias, granos integrales, nueces, uvas, zumo de uvas, vino tinto y té verde.
Saponinas: Presentan actividad antioxidante y anticancerígena. Se encuentran en las leguminosas como frijol, lenteja y garbanzo y en algunas legumbres.
Terpenos: Aumentan la producción de enzimas anticancerígenas. Están en las frutas cítricas.