Metabolismo de la glutamina I
Este aminoácido está directamente vinculado en la regulación de la síntesis proteica, siendo un poderoso estimulador anabólico
Para la mayoría de las personas, la glutamina es sólo uno de los 20 aminoácidos que son utilizados para fabricar proteínas. No es todavía considerada como un aminoácido esencial, porque el cuerpo es capaz de producir por si propio. Sin embargo, la glutamina es el único aminoácido y el más importante en el organismo para crear un ambiente anabólico en el músculo y protegiendo al organismo de los maleficios del sobre-entrenamiento.Parece casi increíble que un único aminoácido libre podría realizar tantas cosas en el cuerpo. La importancia de la glutamina es sub-apreciada por su propia abundancia.
Aunque todos los tejidos corporales contienen glutamina, y es el aminoácido más abundante en el músculo; esto indica que como normalmente es encontrada en grandes cantidades en el cuerpo, es porque tendrá una función importante, en especial en los tejidos que contienen la mayor parte de ella. La cuestión significativa se relaciona a lo que acontece cuando nuestro cuerpo es puesto bajo estrés y los niveles de glutamina empiezan a decaer.
El Metabolismo de la glutamina
La glutamina es considerada un aminoácido semi-esencial por su gran relevancia, y aunque sea obtenida a través de nuestra dieta, es necesario que el organismo produzca más para satisfacer las enormes cantidades exigidas.
Los principales tejidos en el cuerpo humano para la producción de glutamina es el músculo. El músculo es capaz de combinar amonio con los ácidos glutámicos para formar glutamina. La producción de glutamina en el músculo es tan grande que es responsable por más de 60% de los aminoácidos libres presentes en las células musculares. Estos grandes almacenes musculares también contienen la mayoría de las reservas de glutamina en el cuerpo, que pueden liberarla para la mantención de los niveles de plasma o suministrar glutamina a otros tejidos.
Los efectos del estrés en la glutamina
Bajo condiciones fisiológicas normales el organismo puede producir toda la glutamina que necesita. Un delicado equilibrio es mantenido entre los tejidos que producen y liberan glutamina y aquellos que están dependientes en ella. El motivo por la cuál tantos tejidos necesitan de glutamina es debido a su número de aplicaciones en el cuerpo humano.
- La glutamina regula los niveles de amonio en los tejidos, lo que puede ser tóxico para células del organismo. El amonio es usado para producir glutamina que será liberada posteriormente en la sangre. Aquí, la glutamina es transferida para otros tejidos, para ser usada como combustible, siendo más exigida por las células del sistema inmunológico.
- Además la glutamina está directamente vinculada en la regulación de la síntesis proteica y en la degradación, siendo un poderoso estimulador anabólico. Por estas razones, es quizás uno de los más versátiles aminoácidos en el organismo.
Estructura de la glutamina
Cuando la fisiología del cuerpo es alterada por factores tales como el estrés o la enfermedad, las necesidades de glutamina extra pueden cambiar drásticamente. Una forma de estrés que ocurre cuando el cuerpo está sujeto a entrenamientos intensos y con grandes cargas. Durante este entrenamiento, la utilización de glutamina por otros órganos del cuerpo aumenta en respuesta al estrés corporal. Como resultado, los niveles plasmáticos empiezan a caer drásticamente. Para reponer esos niveles, los músculos empiezan a liberar sus reservas de glutamina en la sangre.
El ejercicios intensos también causan la producción de ácido láctico y de amonio por los músculos. Para soportar esos productos tóxicos, la producción de glutamina a partir de glutamato y amonio también es aumentada. Este extra de glutamina es rápidamente transportado a la sangre a un grado tal que los niveles plasmáticos de glutamina empiezan a crecer en cinco minutos, es decir, durante el entrenamiento. Como resultado, muchos de los tejidos que necesitan de glutamina, y no la pueden producir, son suministrados con amplios abastecimientos durante el ejercicio físico. El problema es que los músculos están con las reservas de glutamina siempre en descenso.
El ejercicio físico intenso también puede causar la liberación de hormonas catabólicas, tales como los corticosteroides. Estos glicocorticoides también contribuyen al agotamiento de las reservas de glutamina en el músculo, aumentando la liberación de glutamina a partir de células musculares. Estas hormonas catabólicas pueden causar la liberación continúa de glutamina, inclusive tras el entrenamiento. El resultado final es la reducción de las reservas de glutamina en los músculos.