Pilates, un aliado contra la osteoporosis
La necesidad de mejorar el soporte óseo por medio del fortalecimiento de los músculos posturales y articulares es fundamental
Los beneficios de la rehabilitación proveídos por la práctica del método Pilates están asociados a una gran variedad de factores. La osteoporosis es un proceso caracterizado por la pérdida de la masa ósea y la disminución de la resistencia mecánica de los huesos por diversas causas. Entre los factores que predisponen la enfermedad podemos citar los desequilibrios hormonales (generalmente, relacionados al periodo de la menopausia de la mujer), el sedentarismo, el déficit en la absorción de calcio, entre otros. Las regiones del cuerpo más alcanzadas son las caderas, los puños y la porción anterior de las zonas vertebrales, las cuales sufren desgastes con simple inclinaciones repetidas del tronco hacia el frente, generando fracturas espontáneas.
La disminución de la masa ósea aumenta el riesgo de fracturas, aunque en los casos en que no ocurra ningún tipo de traumatismo o accidente, la fragilidad ósea es tan expresiva que el propio peso corporal o un movimiento mal realizado pueden provocar fracturas.
Por qué practicar Pilates
La necesidad de mejorar el soporte óseo por medio del fortalecimiento de los músculos posturales y articulares es fundamental para las personas con osteoporosis según muchos fisioterapeutas y profesionales médicos especializados.
La práctica de ejercicios físicos, con resistencia constante, con el objetivo de aumentar la densidad ósea y las condiciones físicas generales de los pacientes, es de fundamental importancia en la lucha para mejorar la condición ósea de modo a tener un cuadro progresivo. Teniendo en cuenta que la osteoporosis puede ser común en personas de la tercera edad, y que en esta parte de la población, los ejercicios de impacto no son indicados y el grado de avance de la osteoporosis es todavía mayor, el método Pilates surge como una opción ideal por no presentar casi ninguna contraindicación ayudando a trabajar el equilibrio, la coordinación y la fuerza muscular. Además de eso, disminuye el riesgo de sufrir fracturas.
La práctica de Pilates como un método de acondicionamiento físico integral, con más de nueve décadas de experiencia, proporciona un control corporal y el equilibrio muscular, con el fortalecimiento de la musculatura débil y el estiramiento de los músculos acortados, además, se puede tener una ganancia en el control, en la fuerza y en la flexibilidad del cuerpo respetando cada articulación.
La terapia rehabilitadora realizada por un profesional capacitado, permitirá un efectivo tratamiento contra los efectos adversos provenientes de la osteoporosis de una manera saludable y renovadora, combatiendo síntomas dolorosos y previniendo el avance de la enfermedad.
Beneficios del trabajo con Pilates en el suelo
- Aumenta la flexibilidad, ejecutando movimientos más fluidos que proporcionan mayor agilidad, fundamental para cada actividad diaria sin provocar fatiga.
- Equilibra los grupos musculares antagonistas y mejora el posicionamiento corporal a través de ejercicios de estiramientos ligeros.
- Se obtiene ganancia en la amplitud de movimientos, mejorando la función articular y liberando estructuras rígidas.
- Proporciona un mejor alineamiento postural mediante la ganancia de equilibrio muscular para prevenir lesiones o evitar patrones de movimientos incorrectos, los cuales, con el pasar del tiempo, incorporan posicionamientos dañosos en el esquema corporal.
- Realiza trabajos musculares controlados con el objetivo de mejorar la nutrición, la oxigenación de los músculos y la calidad de su función.
- Posibilita la reeducación postural que permite incorporar hábitos de vida saludables, disminuyendo los factores de riesgo que pueden llevar la lesiones.
- Acrecenta la rutina diaria con una actividad recreativa diferente, haciendo que la mente se encuentre más relajada, generando una disminución de la ansiedad y del nerviosismo provocados por el estrés y por las tensiones del día a día.
Pilates y el mundo de la medicina
En los últimos tiempos, está aumentando el número de médicos de diferentes especialidades que recomiendan la práctica de Pilates. Sin embargo, todavía existe cierta resistencia a la práctica del método por parte de algunos profesionales del ámbito de la salud, lo que según los fisioterapeutas, son consecuencia de la falta de información sobre los beneficios del Pilates como terapia de rehabilitación y del amplio campo de acción en que puede ser utilizado y, por otro lado, el desprestigio que sufre el método cuando es orientado por personas sin escrúpulos que no poseen conocimientos necesarios para desempeñar tal área de rehabilitación.
Aunque hubieron dificultades que surgieron al comienzo; hoy los médicos y profesionales de la salud empiezan a reconocer los beneficios del Pilates y evalúan sus resultados de manera positiva, incorporándolos como una terapia de elección en sus tratamientos y variaciones de terapia física.
El método Pilates ofrece al profesional de la salud una gama de posibilidades adecuadas que el paciente necesita. Siendo así, el profesional dispone de una nueva herramienta de trabajo, aplicable de forma satisfactoria tanto al cuidado del cuerpo ya impactado por los efectos de una patología como en la prevención de la misma.
Los resultados a corto plazo
Los resultados de la práctica del método Pilates en pacientes con osteoporosis empiezan a ser notados en poco tiempo. Durante las primeras sesiones ya existe una mejora del sueño, aumento del trabajo muscular, aumento de la relajación, sensación de bienestar, todo esto en poco tiempo y empiezan a mostrar una mejora notable del tono muscular, aumento de la flexibilidad, corrección postural, relajación consciente, mejora de la circulación y bienestar general con aumento de los niveles de energía.
Durante los ejercicios realizados con Pilates, los músculos realizan tracciones a nivel óseo, haciendo que los huesos ganen mayor densidad ósea, estimulando la formación de la masa ósea. Está comprobado que la densidad ósea en una persona sedentaria es menor que en personas que realizan ejercicios físicos alo largo de la vida.