El papel de los músculos en la salud
Un punto de vista diferente al que conocemos tradicionalmente
Para el común de las personas que no van el gimnasio, la palabra “músculos” trae a sus mentes curvas musculares hinchadas y por supuesto imágenes de culturistas, y así como la importancia de la masa muscular, fuerza y función metabólica en el desempeño del ejercicio y del deporte nunca fue cuestionada; sin embargo, los músculos no son solo sirven para el “show”.
Papel del músculo en el metabolismo del cuerpo
El músculo esquelético es el tejido más abundante en el cuerpo humano, y el mantenimiento de su masa es esencial para asegurar funciones básicas como la fuerza de locomoción y respiración; para que podamos sobrevivir y además algunos tejidos y órganos, como el cerebro, corazón, hígado y piel necesitan de mantener su contenido de proteína; éstos tejidos y órganos esenciales dependen de una provisión constante de aminoácidos a través de la sangre para servir como precursores para la síntesis de nuevas proteínas de modo a equilibrar la tasa persistente de degradación de proteínas que ocurre en todos los tejidos.
- En la ausencia de ingesta de nutrientes (por ejemplo, entre horas y durante el sueño), la proteína muscular sirve como reserva principal para reponer los aminoácidos que son absorbidos por otros tejidos.
- En ayuno, los aminoácidos de la sangre sirven no solo como precursores para la síntesis de proteínas, sino también como precursores para la gliconeogénesis hepática.
- La masa de proteínas de los tejidos y órganos esenciales, así como la concentración de glucosa plasmática necesaria pueden ser mantenidas a niveles relativamente constantes a pesar de la ausencia de ingesta nutricional siempre que la cantidad de masa muscular sea suficiente para suministrar los aminoácidos necesarios.
El destino principal de la ingesta de aminoácidos es su incorporación en la proteína muscular para reponer las reservas de aminoácidos perdidas en ayuno ya que en condiciones normales, las ganancias de masa proteica muscular en el estado alimentado, equilibran la pérdida de masa de proteína muscular en ayuno y la capacidad de degradación de proteínas musculares para mantener las concentraciones de aminoácidos es notable, si la cantidad adecuada de masa muscular está disponible.
Papel del músculo en la enfermedad crónica
Las enfermedades crónicas relacionadas con comportamientos de vida deficientes, son responsables por más de dos tercios de las muertes, y las alteraciones en el músculo y pérdida de masa muscular, desempeñan un papel importante en las enfermedades y condiciones médicas más comunes.
Las enfermedades cardiacas y el cáncer son las principales enfermedades crónicas de que se padece en el mundo occidental, y tanto la insuficiencia cardiaca como el cáncer están frecuentemente asociadas a una pérdida rápida y extensa de la masa muscular, fuerza y función metabólica (caquexia).
Con la caquexia derivada de las enfermedades cardiacas y el cáncer, la pérdida de masa muscular es un factor determinante de supervivencia; en esas condiciones, ocurren alteraciones notables en el metabolismo muscular, especialmente una expresión aumentada de vías musculares catabólicas y aumento de los niveles de miostatina (que inhibe el crecimiento muscular).
Otra condición crónica que es causada por la pérdida de masa muscular es la sarcopenia, que es una pérdida progresiva de masa muscular y función que ocurre con el envejecimiento y causa fragilidad.
- La sarcopenia es un síndrome generalizado de que tiene un efecto devastador en la calidad de vida, actividades de la vida diaria y, finalmente, en la supervivencia.
- La pérdida de masa muscular no es solo negativa para las personas con más edad y también ocurre en personas más jóvenes, siendo llamada miopenia.
El ejercicio físico es beneficioso en el tratamiento de enfermedades crónicas y de las condiciones que causan o son causadas por, pérdida de masa muscular, recordando que otra enfermedad crónica, en la cual la masa muscular (y el ejercicio) es importante, es la osteoporosis.
- La fuerza mecánica aplicada sobre el hueso es esencial para el aumento y mantenimiento de la masa y resistencia ósea.
- Considerando que el peso corporal y los ejercicios con resistencia adicional proporcionan una fuerza mecánica directa sobre los huesos, se cree que la mayor tensión sobre los huesos es proveniente de las contracciones musculares.
Las correlaciones entre fuerza de agarre y el área ósea, contenido mineral óseo y densidad mineral ósea tanto en atletas saludables como en pacientes con AVC, apoyan la noción de que las contracciones musculares desempeñan un papel significativo en la resistencia ósea y cantidad de masa, incluso la correlación entre el peso corporal y masa ósea puede ser explicada con base de la fuerza ejercida sobre el hueso debido a las contracciones musculares, en que es preciso más fuerza por unidad de superficie para mover cuerpos pesados.
Más allá de esto, los cambios en la masa ósea y fuerza muscular se mueven en la misma dirección a lo largo de la vida; aunque sea discutible si la fuerza muscular o simplemente la masa muscular es importante en la determinación de la masa y resistencia ósea, ha sido demostrado que la masa muscular está positivamente correlacionada con el contenido mineral y densidad mineral ósea.
Así, el mantenimiento de la resistencia y densidad ósea adecuada con el envejecimiento es altamente dependiente del mantenimiento y funcionamiento adecuado de la masa muscular.
Papel del músculo en la prevención del sobrepeso
Considerando que el papel del músculo es fundamental y obvio en síndromes como la sarcopenia y caquexia, que son definidos por lo menos en parte, por la pérdida de fuerza y masa muscular, el potencial papel del músculo en la prevención del sobrepeso no es muchas veces apreciado.
El desarrollo del sobrepeso resulta de un desequilibrio de energía durante un periodo prolongado de tiempo, lo que significa que la ingesta de energía excede el gasto de energía.
Todos pueden disfrutar de los beneficios del entrenamiento de musculación
Nuestra sociedad está enfocada en la dieta, el lado del consumo de energía de la ecuación de equilibrio de energía obtiene casi toda la atención siendo esto lamentable, ya que la variación de nuestro gasto de energía es lo más importante.
El equilibrio energético, que significa un balance entre el consumo y el gasto de energía debe ser el punto central para alcanzar un nivel saludable; un corte solo en nuestra ingesta calórica no involucrará a nuestro balance de energía en un nivel saludable, entonces solo causará privación y frustración.
- El gasto energético total es la suma del gasto energético en reposo (REE), el efecto térmico de los alimentos y gasto energético relacionado con actividades físicas.
- Nuestra masa muscular, y los gastos relacionados con la energía para el metabolismo muscular, afectan tanto el gasto energético en reposo con en actividad física.
- El gasto energético provocado por la actividad física es obvio, mientras más músculo tengamos, más carga conseguiremos levantar, y más calorías gastaremos, sin embargo, el gasto energético dedicado por nuestro metabolismo en reposo también puede ser bastante significativo si tuviéramos una mayor cantidad de masa muscular.
Vamos a dar una vistazo al cálculo simple para ilustrar esto:
El volumen de proteína de los órganos y tejidos del cuerpo es mantenido a un nivel bastante constante; en contraste, son posibles grandes variaciones en la masa muscular, y el ratio de síntesis de proteína muscular (o sea, la síntesis proteica muscular y su degradación) también pueden variar; recordando que la síntesis y degradación de la proteína muscular son los principales responsables para el gasto energético de los músculos en reposo.
La masa muscular media de los hombres jóvenes saludables varía entre los 35 a 50 kg; en contraste, una mujer de edad mayor puede tener menos de 13 kg de músculo y aunque no sepamos la cantidad exacta de energía que es dedicada en la síntesis y degradación de proteínas musculares, podemos hacer una estimativa conservadora con base en la síntesis proteica muscular, para nuestro hombre joven y para nuestra mujer mayor, el gasto energético diario como resultado de la síntesis de proteína muscular, puede variar de 485 kcal/día a 120 kcal/día
Esta es una diferencia muy grande, y ni siquiera estamos teniendo en consideración cualquier aumento en el volumen de la síntesis y degradación de proteínas causada por la actividad física; significando este ejemplo que el joven masculino no es un culturista.
En términos de equilibrio energético del cuerpo entero, la diferencia del gasto de energía de 365 kcal/día, resultantes de una diferencia en la síntesis y degradación de proteína muscular, llevaría a una ganancia o pérdida de 47 g de masa adiposa por día, porque 1 kg de grasa suministra 7.700 kcal; y si la actividad y la dieta se mantengan constantes, esto significaría una ganancia o pérdida de 1,4 kg de masa adiposa por mes.
Ese efecto en el equilibrio energético es particularmente impresionante cuando se percibe que la estimativa dada arriba para el gasto energético asociado con el “turn-over” de proteína muscular es probablemente subestimada, porque la degradación de proteína también requiere energía y es evidente que a partir de estas estimativas que cuando es considerada una perspectiva de largo plazo, incluso diferencias relativamente pequeñas (por ejemplo, 10 kg) de masa muscular podrían tener un efecto significativo en el equilibrio energético.
- Cada diferencia de 10 kg masivo de masa magra se traduce en una diferencia de gasto energético de aproximadamente 100 kcal / día, asumiendo una tasa constante de “turn-over” de proteína.
- Al considerar la magnitud de los desequilibrios energéticos que causan el sobrepeso, es razonable visualizar la situación por largos periodos de tiempo, porque el sobrepso se desarrolla frecuentemente a lo largo de meses y hasta años.
La diferencia en el gasto energético de 100 kcal/día se traduce en la pérdida de aproximadamente 4,7 kg de masa adiposa por año, así el mantenimiento de una gran masa muscular y consecuente volumen de “turn-over” de proteína muscular, puede contribuir para la prevención del sobrepeso.
El aumento de la masa muscular puede ser capitalizado para facilitar la pérdida de grasa siendo evidente a partir de los cálculos presentados arriba que una estimulación del volumen de “turn-over” de proteína muscular en el contexto de un aumento de la masa muscular, podría tener un efecto significativo en el gasto energético en reposo, y por consecuencia en el equilibrio energético; esto puede ser hecho a través de la nutrición, porque el aumento de la disponibilidad de aminoácidos, a través del aumento de la ingesta de proteínas, aumenta el volumen de “turn-over” de proteína muscular.
Es interesante saber que las calorías usadas para suministrar energía para el “turn-over “ de proteína muscular es en gran medida derivada de la grasa almacenada, porque esta es la fuente de energía preferida del músculo en reposo; esto fue confirmado en estudios de inyección de testosterona en hombres muy mayores con hipogonadismo, en que el aumento de la síntesis proteica muscular y masa magra del cuerpo a lo largo del tiempo, fue acompañada por una disminución de la masa grasa.