Gachas de Avena con canela, miel y nueces

Publicado el 25 abril, 2012 | Health

El poder de las fibras, las grasas buenas y la regulación de insulina para el desayuno o la merienda

Las gachas de avena son una papilla hecha con avena cocida en agua o leche y que son servidas en los desayunos anglosajones pero también aprovechado por muchos atletas ibéricos aprovechando las bondades de sus ingredientes; el rendimiento deportivo exige unos requerimientos dietéticos completamente distintos a los de la población normal, un porcentaje elevado de la ingesta calórica diaria de un deportista debe proceder de los hidratos de carbono (entre un 50% y 70%) ya que éstos en forma de glucógeno son el combustible para la contracción muscular. 

Teniendo en cuenta esto se piensa que para conseguir una correcta nutricón se debe incorporar entre los alimentos productos eminentemente energéticos como lo son los Copos de Avena que cocinados en una papilla deliciosa pueden formar parte de un desayuno realmente poderoso para los practicantes de fitness o musculación.

Las nueces dan su aporte en grasas saludables y antioxidantes importantes para los que entrenan duro y desean añadir a su dieta ese aporte nutritivo con una buena cantidad de proteínas de alta calidad, vitaminas y minerales, fibra alimenticia y libre de glúten; la miel por su parte ha sido reconocida por sus propiedades antimicrobianas y sobre todo es muy poderosa para el incremento natural de testosterona que se siente tan en la líbido como en los entrenamientos.

Para completar esta receta agregamos la canela que también ayuda a la insulina a aumentar el metabolismo de la glucosa en células de grasa durante el proceso de pérdida de grasa corporal mientras se mantiene al máximo la masa muscular magra.

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Ingredientes básicos para una persona:

  • 1 taza de agua (aproximadamente 200 ml).
  • 3 cucharas soperas de avena.
  • Un puñado de nueces.
  • Leche magra o de soja y miel.
  • Canela a gusto.

Preparación:

  • Colocar el agua fría en una pequeña cacerola que ya está precalentada y combinarla con la avena; cocer la mezcla a fuego lento revolviendo despacio durante aproximadamente 5 minutos.
  • Servir la papilla en un plato hondo y polvorear con la canela y la miel, aquí se puede añadir la leche a gusto para que la avena no quede muy espesa.
  • Añadir las nueces trituradas al plato o tazón.
  • Usar la imaginación y adaptar esta receta al desayuno ya sea frío o caliente.

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